La testosterona desempeña un papel mucho más amplio en el cuerpo del que se piensa

Esta hormona sexual no solo regula la libido y la función sexual en hombres (y también en mujeres), sino que es clave para mantener la masa muscular, la densidad ósea y la distribución de grasa corporal

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Redacción
Bienestar
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Numerosos factores pueden afectar los niveles de testosterona: desde el estilo de vida —como la alimentación, el sueño, el estrés y el peso corporal— hasta condiciones médicas como la diabetes, ciertos trastornos genéticos y, por supuesto, el envejecimiento. Con el paso del tiempo, las glándulas responsables de su producción comienzan a declinar.

Cualquiera que sea la causa, los niveles bajos de testosterona no solo afectan el deseo y la función sexual, sino que pueden provocar síntomas como pérdida de masa muscular, aumento de peso, fatiga, cambios en el estado de ánimo e incluso osteoporosis.

De hecho, cerca del 40% de los hombres mayores de 45 años y más del 50% de los mayores de 75 presentan niveles bajos de testosterona, según el Dr. Akhil Muthigi, urólogo del Hospital Houston Methodist.

En algunos casos, los niveles bajos pueden mejorar con cambios en el estilo de vida. Sin embargo, cuando estas medidas no son suficientes, la terapia de reemplazo de testosterona (TRT, por sus siglas en inglés) puede ser una opción efectiva. El Dr. Muthigi explica en qué consiste esta terapia y cuáles son los síntomas que los hombres no deberían ignorar.

¿Cuáles son los signos y síntomas de la testosterona baja en los hombres? Aunque a veces se habla de testosterona baja como sinónimo de hipogonadismo masculino, son diagnósticos distintos, explica el Dr. Muthigi.

• La testosterona baja se diagnostica cuando el nivel total de testosterona en sangre es inferior a 300 nanogramos por decilitro (ng/dL). • El hipogonadismo incluye tanto niveles bajos de testosterona como síntomas clínicos específicos. Entre estos síntomas se encuentran: • Bajo deseo sexual • Fatiga o depresión • Cambios en el estado de ánimo o en la concentración • Anemia • Disfunción eréctil • Infertilidad masculina • Aumento de grasa corporal • Disminución de masa muscular • Formación de tejido mamario (ginecomastia) Es decir, algunos hombres pueden tener testosterona baja sin presentar todos los síntomas clásicos del hipogonadismo.

Sin una prueba de sangre, podrían no saberlo.

¿Qué provoca la testosterona baja o el hipogonadismo?

Hasta los 30 años, los niveles de testosterona en la mayoría de los hombres se mantienen estables, gracias a un complejo sistema hormonal que involucra los testículos, el hipotálamo y la glándula pituitaria.

Con la edad, el funcionamiento del hipotálamo y la pituitaria comienza a declinar, lo que reduce la producción de testosterona en los testículos. Aunque esta caída es natural, la velocidad varía según la genética y el estilo de vida de cada hombre. Otras causas comunes, según el Dr. Muthigi, incluyen:

• Infecciones como paperas • Radioterapia • Lesiones en los testículos, glándulas suprarrenales o pituitaria • Obesidad o síndrome metabólico • Medicamentos como quimioterapia, esteroides u opioides • Consumo excesivo de alcohol o tabaco • Enfermedades crónicas como diabetes, insuficiencia renal o cirrosis hepática • Trastornos genéticos o mutaciones hereditarias

¿Cómo se trata inicialmente la testosterona baja? El tratamiento depende de la causa y del diagnóstico. El primer paso, dice el Dr. Muthigi, son cambios en el estilo de vida que favorecen la producción natural de testosterona: • Ejercicio regular (fuerza y cardio) • Sueño adecuado • Reducción del estrés • Dieta rica en proteínas • Pérdida de peso, si es necesario

Si estas medidas no logran aumentar los niveles de forma natural, se puede considerar la terapia de reemplazo hormonal.
“En mi consulta —y en la mayoría de las clínicas especializadas en andrología— si un paciente cumple con los criterios de hipogonadismo, se le ofrece terapia con testosterona, siempre y cuando no haya contraindicaciones”, aclara el Dr. Muthigi. Estas contraindicaciones pueden incluir: • Deseo de conservar la fertilidad • Infarto o accidente cerebrovascular reciente • Cáncer de próstata avanzado tratado con terapia hormonal, entre otros

¿Cómo funciona la terapia de reemplazo de testosterona?

“La andrología ha avanzado significativamente en la última década”, comenta el Dr. Muthigi, experto del Hospital Houston Methodist que nos explica cómo hoy en día existen múltiples formulaciones aprobadas por la FDA (Food and Drugs Administration de los Estados Unidos) que son seguras y efectivas:

• Geles y parches tópicos: Se aplican sobre la piel y se absorben en el torrente sanguíneo. No deben entrar en contacto con otras personas, para evitar transferencia accidental. • Spray nasal: Se aplica dentro de la nariz y no conlleva riesgo de transferencia. Requiere aplicaciones más frecuentes. • Inyecciones: Útiles para quienes tienen problemas de absorción, no desayunan o prefieren evitar el uso de geles. Pueden ser de acción corta o prolongada. • Formulaciones orales: Aunque en el pasado se relacionaban con toxicidad hepática, las nuevas versiones no presentan ese riesgo y tienen buena absorción.

“La elección final del tipo de tratamiento se toma de manera conjunta con el paciente, en función de sus metas y preferencias”, enfatiza el especialista en salud masculina.

¿Cuáles son los posibles efectos secundarios de la TRT? En 2015, la FDA pidió a los laboratorios incluir advertencias sobre posibles riesgos cardiovasculares. Sin embargo, en febrero de 2025, tras revisar un gran ensayo clínico, la FDA eliminó la advertencia de riesgo cardíaco de las etiquetas.

El estudio, publicado en The New England Journal of Medicine, concluyó que la TRT no aumenta el riesgo cardiovascular. “Cada vez hay más evidencia que demuestra que la testosterona es segura desde el punto de vista cardiovascular”, afirma el Dr. Muthigi. “De hecho, los niveles bajos de testosterona están vinculados con mayor riesgo cardíaco”.

También hay nuevos datos que sugieren que la TRT puede ser segura incluso en hombres con cáncer de próstata, siempre bajo vigilancia de un especialista.

Dicho esto, la terapia hormonal no está exenta de riesgos:

• Disminución de fertilidad y conteo espermático • Aumento en el número de glóbulos rojos (policitemia), que puede generar coágulos si no se monitorea • Acné • Ginecomastia • Bochornos Cada caso debe ser evaluado individualmente por un especialista en andrología.

¿Cuándo consultar por testosterona baja?

“Si un hombre presenta alguno de los síntomas característicos de testosterona baja o hipogonadismo, debe acudir con un especialista para una historia clínica completa, exploración física y análisis de laboratorio”, recomienda el Dr. Muthigi. Esto incluye una prueba de sangre tomada entre las 7 y 9 de la mañana —cuando los niveles son más altos—, así como un perfil hormonal completo, si se considera necesario.

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