Ciudad de México, 8 de octubre de 2025.- En el mundo, 99 por ciento de la población vive en lugares donde la calidad del aire supera los límites de las directrices marcadas por la Organización Mundial de la Salud, alertó la investigadora del Grupo de Aerosoles Atmosféricos del Instituto de Ciencias de la Atmósfera y Cambio Climático (ICAyCC) de la UNAM, Telma Gloria Castro Romero.
Ello es preocupante porque cualquier tipo de emisión, desde el smog hasta el humo de los hogares, representa un riesgo para la salud y el clima globales, puntualizó durante la reunión moderada por el director del ICAyCC, Jorge Zavala Hidalgo.
La científica enfatizó que la mala calidad del aire y el cambio climático están estrechamente relacionados debido a la quema de combustibles fósiles que liberan contaminantes a la atmósfera y gases de efecto invernadero.
Es importante saber dónde se originan y, una vez en la atmósfera, la manera en que se modifican y cómo cambian a otros químicos y van evolucionando. El dióxido de carbono es considerado el principal gas de efecto invernadero, pero las emisiones siguen aumentando en el mundo, según datos de la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, pasando de 422.99 partes por millón (ppm) en agosto de 2024, a 425.48 ppm para agosto de 2025.
Al participar en el foro Estado actual y futuro de la investigación sobre contaminación atmosférica, realizado en el ICAyCC, Elizabeth Vega Rangel, investigadora del Departamento de Ciencias Ambientales de esta entidad académica, expuso:
En un ejercicio de investigación realizado durante la pandemia por la COVID-19, se examinó la relación y variación de partículas en interiores y exteriores de diferentes tamaños en 38 viviendas de 16 alcaldías de la Ciudad de México.
En 72 por ciento de las casas las concentraciones de material particulado (PM) 2.5 eran más elevadas en el interior, comparadas con las medidas en el exterior; y en 80 por ciento de los inmuebles donde hay fumadores las concentraciones tienen picos mayores, en comparación con otras casas.
La doctora en química analítica coincidió en que comprender las fuentes de contaminantes en interiores es esencial para desarrollar estrategias de control eficaces, lo que debe considerar cocción de alimentos, actividades de limpieza, fumar y número de ocupantes. En ese sentido, mantener ventilados los espacios puede reducir la exposición.