La Organización Panamericana de la Salud advierte que la incidencia de cáncer de próstata se incrementará 84% si hoy no se toman medidas al respecto.
Factores como alto consumo de carnes rojas y productos lácteos, poca hidratación, tabaquismo y vida sedentaria incrementan el riesgo de presentar cáncer de próstata en varones a partir de los 40 años. En México esta enfermedad afectó en 2024 a 25 mil hombres, de los que siete mil 500 perdieron la batalla debido a que fueron diagnosticados cuando la neoplasia estaba en fase avanzada.
Ahora la detección del cáncer de próstata puede realizarse a través de una prueba de antígeno prostático, la cual consiste en la toma de una gota de sangre del dedo.
En caso de que los niveles sean altos se recomienda acudir con un especialista en oncología o urólogo para la realización de un ultrasonido y tacto rectal. En los pacientes que se atienden a tiempo la curación es de 95 por ciento.
De acuerdo con cifras del Observatorio Global del Cáncer (Globocan) más de 1.4 millones de nuevos casos se diagnostican cada año y cerca de 400 mil hombres fallecen por esta causa. En América Latina y el Caribe se reportan más de 200 mil nuevos diagnósticos y más de 60 mil muertes anuales.
El escenario en esta región para los próximos cinco años muestra un incremento considerable de la enfermedad. La Organización Panamericana de la Salud (OPS) advierte que la incidencia de cáncer de próstata se incrementará 84% si hoy no se toman medidas al respecto.
“Uno de los mayores desafíos es detectar el cáncer cuando aún está confinado a la próstata. Es decir, cuando se considera localizado y hay más probabilidades de ser curable. Esa es la etapa en que el tratamiento tiene mayores probabilidades de éxito. Hay que romper barreras socioculturales”, reconoce la doctora Mariana Flores Alcántara, gerente médico de Adium México.
Primer paso
Existe una diversidad de características que aumentan el riesgo en los hombres de padecer la enfermedad, como la raza, antecedentes familiares, cambios genéticos heredados y edad.
“Si el individuo tiene un hermano o padre diagnosticado con este tipo de cáncer se duplica el riesgo de padecer la enfermedad. Igualmente, tener mutaciones hereditarias de los genes BRCA1 o BRCA2, o la condición genética conocida como síndrome de Lynch, son condiciones que aumentan la probabilidad de padecer cualquier tipo de cáncer, incluyendo el de próstata”, detalla la especialista.
Por otra parte, la edad avanzada, la obesidad, hipertensión y niveles elevados de testosterona son condiciones que podrían influir en el desarrollo de cáncer de próstata.
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recomienda que los hombres entre 45 y 74 años acudan al médico a realizarse pruebas de diagnóstico como el antígeno prostático y la exploración digital rectal, para detectar de forma oportuna la enfermedad.
Aunque el cáncer de próstata puede no dar señales en etapas iniciales, se debe prestar atención a síntomas como sangre en la orina o semen, necesidad de orinar con mayor frecuencia, flujo débil, ardor al orinar o dolor persistente en espalda baja, pelvis o muslo.
“El tacto rectal, el antígeno prostático específico (PSA) y la ecografía prostática son pruebas que se complementan entre sí. Ninguna reemplaza a la otra, y todas son necesarias para un diagnóstico certero”, subraya la doctora.
Los expertos coinciden en que el primer paso para cambiar el futuro del cáncer de próstata es informarse. “Consultar al médico ante cualquier duda o síntoma y realizar chequeos periódicos a partir de los 40 años, incluso sin factores de riesgo, puede marcar una gran diferencia”, destaca Flores.
Cirugía menos invasiva y más precisa
Frente a esta problemática, Cleveland Clinic desarrolló la Prostatectomía Parcial Transvesical con Puerto Único (SP-TVRAPP). Se trata de un procedimiento robótico mínimamente invasivo que permite extirpar únicamente el tejido canceroso, preservando el resto de la glándula prostática. La técnica la presentaron recientemente el doctor Jihad Kaouk y la doctora Adriana Pedraza durante la Reunión Anual 2025 de la Asociación Americana de Urología.
“Este procedimiento representa un avance significativo para los hombres que buscan una solución efectiva con menores efectos secundarios”, explica el especialista, quien añade que “buscamos atacar el cáncer sin sacrificar la calidad de vida del paciente”.
Los datos del estudio con 26 pacientes demostraron resultados funcionales alentadores: casi 90% recuperó la continencia urinaria en seis semanas y más de 70% recuperó la función eréctil al mismo tiempo, cifras que mejoran con el tiempo. Además, 80.8% de los casos lograron márgenes quirúrgicos negativos, asegurando la remoción completa del tumor sin enfermedad metastásica.
La técnica SP-TVRAPP marca un parteaguas en el tratamiento del cáncer de próstata al ofrecer una opción intermedia entre los dos enfoques tradicionales: la prostatectomía radical, que implica la extirpación total de la próstata y puede generar efectos secundarios significativos, así como la vigilancia activa, que consiste en monitorear el tumor sin intervenir de inmediato.
Esta innovadora alternativa quirúrgica permite tratar el cáncer localizado con alta precisión, minimizando el impacto funcional y preservando la calidad de vida del paciente.
Llamado a la acción
Especialistas recomiendan:
- Realizarse revisiones médicas anuales a partir de los 50 años o antes si hay antecedentes familiares.
- Consultar al médico ante síntomas urinarios o disfunción sexual.
- Informarse sobre alternativas terapéuticas que prioricen la calidad de vida, como SP-TVRAPP.
Fuente: Cleveland Clinic