Ya no es ninguna novedad que el principal problema de salud en México es la obesidad, tanto en la población de adultos como en niños y jóvenes. De acuerdo a cifras del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el 77% de los pacientes mayores de 20 años presentan sobrepeso y obesidad, es decir, aproximadamente 1 de cada 4 mexicanos son obesos.
El problema no sólo es parte de la población adulta en México. Según estimaciones de UNICEF, 1 de cada 3 niños de 6 a 19 años en el país tiene sobrepeso u obesidad. Estas condiciones son un verdadero problema de salud entre la población mexicana y de la cual derivan padecimientos crónicos.
“Con frecuencia se suele estigmatizar al sobrepeso y la obesidad. Se piensa que sólo es consecuencia de malos hábitos alimenticios o sedentarismo. Sin embargo, la obesidad puede derivar de complicaciones hormonales como los problemas de la tiroides. Sin embargo, es igual de fundamental prevenir y controlar a través de controles médicos adecuados. Es algo que va mucho más allá de simplemente mejorar hábitos y rutinas”, explica el Dr. Roberto Santos, director médico de Kabla, empresa líder en distribución de pruebas diagnósticas.
En este sentido, es importante considerar a la obesidad como una enfermedad que puede ser consecuencia multifactorial, pero que también tiene implicaciones médicas que van más allá de razones estéticas.
Kabla señala tres afectaciones que ocasiona la obesidad y que son poco conocidas entre la población.
Síndrome de hipoventilación
Conocido como síndrome de hipoventilación por obesidad (o SHO), es un padecimiento que causa niveles de oxígeno bajos y un exceso de dióxido de carbono en la sangre. Esto se traduce en problemas para respirar y apnea del sueño, que puede complicarse al impedir la respiración mientras una persona duerme. Además, suele hacer que una persona con obesidad muestre mucho mayor cansancio del que su actividad generaría lo que lleva a un bucle vicioso en el que no se puede descansar por la respiración interrumpida y la falta descanso lleva a mayores complicaciones de sueño.
Accidentes cerebrovasculares
Un accidente cerebrovascular (ACV) se da cuando deja de llegar suficiente sangre al cerebro y con ello también hay una deficiencia de nutrientes. En el caso de los accidentes cerebrovasculares, la obesidad es particularmente insidiosa. No sólo porque es factor de riesgo para este problema médico, sino porque también se conecta con otras afectaciones que después terminan siendo factores de riesgo.
“Los accidentes cerebrovasculares pueden causar parálisis, dolor en distintas partes del cuerpo, dificultad para hablar e incluso pérdida de memoria. Por tal motivo es importante mantener una revisión médica constante y con controles adecuados”, apunta el Director Médico de Kabla.
Distintos tipos de cáncer
En México 12% de las defunciones se deben a algún tipo de cáncer, de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). La obesidad se asocia, generalmente, con 13 tipos distintos de cáncer, desde meningioma (en el tejido que recubre el cerebro) hasta el más común con este factor de riesgo que es el colorrectal.