La Fundación de Investigaciones Sociales (FISAC) realizó su segundo conversatorio Alcohol o Volante: Compromiso de todos con la asistencia de importantes personalidades, donde se abordaron temas relevantes sobre casos de éxito en programas de prevención como Conduce Sin Alcohol, la nueva Ley de Movilidad y los retos que como sociedad enfrentamos para seguir con la tendencia a la baja en accidentes fatales y no fatales relacionados con la combinación alcohol y volante.
De acuerdo al Informe sobre la situación de la seguridad vial (México, 2020), se refleja una disminución en las colisiones relacionadas con el consumo de alcohol del 9.3% en 2014 a 6.6% en 2019.
Jessica Paredes, directora de FISAC, reforzó lo importante que es tener una cultura de responsabilidad ante el consumo que en este caso implica la decisión de no beber cuando se va a manejar e indicó. “Uno de los principales desafíos para el cuidado de la salud y la seguridad de todas nuestras comunidades es la prevención de las muertes por tránsito al combinar alcohol y volante, así como la participación de toda la sociedad en la formulación e implementación de políticas públicas, acciones y estrategias de movilidad para lograr la seguridad vial”.
Pablo Vázquez Camacho, subsecretario de Participación Ciudadana y Prevención del Delito, reiteró que las políticas públicas juegan un rol muy importante en el éxito de la prevención y en este caso el programa Conduce sin Alcohol, es insignia en la Ciudad de México para reducir los accidentes fatales por consumo de alcohol: “Estamos festejando 19 años del programa, con gran éxito y con avances tecnológicos para tener pruebas de alcoholemia con mayor exactitud. Tenemos sistemas de identificación de los cruces con mayor incidencia de accidentes, puntos de revisión cercanos a los centros nocturnos y en puntos estratégicos donde los automovilistas pueden manejar a mayor velocidad”, comentó.
Por su parte, Benjamín Soto Reyna, director de Justicia Cívica de San Pedro Garza García, Nuevo León destacó los resultados por 4 años consecutivos de cero muertes por accidentes viales relacionados con el consumo de alcohol en su municipio. Asimismo, indicó que del 2015 al 2019 60% de los accidentes están relacionados por percances por no guardar la distancia entre vehículos e invadir carriles de circulación.
Subrayó: “La sociedad de San Pedro Garza García ha contribuido al éxito del programa, concientizar es la clave. Es un trabajo en conjunto del gobierno, ciudadanía, asociaciones sociales como FISAC y los medios de comunicación para que este programa haya logrado este éxito”.
Francisco de Anda, Movilidad y Desarrollo México (MDM) comentó que: “El manejar básicamente no combina con nada; ni con comer, ni con distraernos, ni con hacer algún trabajo y menos con consumir alcohol. Estamos en un momento interesante con este segundo Decenio de Acción para la Seguridad Vial 2021-2030 ya que nos brinda un nuevo enfoque de la seguridad vial que es sistémico. No es el ciudadano al que se le debe proteger, es mejorar el sistema de movilidad que busque reducir las muertes y no los accidentes”.
La reciente Ley General de Movilidad y Seguridad Vial establece que todos los estados y municipios del país, estarán obligados a realizar operativos de alcoholímetro de manera permanente, por lo que quedará prohibido que una persona maneje con una alcoholemia superior a 0.25 miligramos por litro de aire espirado o 0.05 grados de alcohol en la sangre.
Para finalizar, Martha Montiel comentó que las estadísticas en la CDMX señalan que la población mayor afectada por el manejo bajo la influencia del alcohol es la adulta joven entre los 33 y 45 años de edad. Pero los más jóvenes están usando cada vez más la motocicleta como medio de transporte y es ahí donde la autoridad debe de redoblar esfuerzos para responder a las necesidades de los motociclistas, trabajar para respetarlos más y tener mejor cultura vial. La causa número uno de los accidentes en la ciudad es el manejar con exceso de velocidad, mencionó.
FISAC reiteró que el conducir bajo los efectos del alcohol es factor de riesgo para incidentes de tránsito fatales y no fatales, de acuerdo con datos de INEGI, se estima que para el año 2021, alrededor del 5% de todos los incidentes de tránsito estuvieron relacionados con el alcohol en México. Si nos centramos únicamente en los casos en que hubo fallecimientos o lesiones, esta proporción es del 8% Estas cifras han reducido como resultado de los muchos esfuerzos que se han realizado a través de los años desde distintos sectores.