La menopausia es una condición física que se registra en la mujeres maduras cuando dejan de funcionar los ovarios y concluye la menstruación sin que haya una enfermedad de por medio, lo que provocará problemas de sofocos, taquicardia, insomnio, dolor de cabeza y cuadros depresivos, entre otros síntomas.
Las primeras manifestaciones son alteraciones en el periodo menstrual, que se pueden presentar por largas temporadas. Al final, el ovario dejará de producir estrógenos, no ovulará y, a partir de ese momento, la mujer ya no será fértil. En promedio, las mexicanas inician el climaterio a los 48 años de edad, aunque hay indicios de que el tabaquismo adelanta la aparición de la menopausia de dos a tres años.
La menopausia es un profundo cambio en las mujeres que afecta de maneras muy diferentes e individuales, su calidad de vida, sus capacidades físicas, mentales y emocionales, vida social, familiar y sexual y que deteriora su estado de salud en formas muy distintas. Sin embargo, con las terapias basadas en la medicina funcional del Centro Engel se pueden superar problemas de irritabilidad incontrolable, insomnio, cansancio inexplicable, cambios de humor, “cerebropausia” o deterioro de las funciones cognitivas asociado a la caída hormonal, sequedad vaginal, trastornos menstruales, pérdida de la masa ósea, aumento del riesgo de infarto y accidente vascular, señaló la química María Engel, fundadora del centro especializado.
Durante la celebración del 40 aniversario del Centro Engel, la especialista en el tema de la menopausia, expuso que cuentan con tratamientos para que las mujeres en climaterio y menopausia puedan superar el deterioro del metabolismo de la grasa corporal, pérdida del músculo esquelético, alteraciones del metabolismo de la glucosa, así como la afectación a múltiples funciones del organismo femenino como la pérdida de la libido y la capacidad orgásmica, cambios en el olor corporal, adelgazamiento y resequedad de la piel, modificación de la textura y densidad del cabello y en general, una tasa acelerada de envejecimiento femenino.
“En Centro Engel además de usar la medicina funcional, observamos a cada paciente de forma individual, es decir, el tratamiento es único y personalizado porque lo que puede funcionarme a mí, puede no ser igual de asertivo para otra mujer, cada una tiene hábitos diferentes y su respuesta ante la menopausia no es igual”, agregó María Engel, quien experimenta en su propio organismo los beneficios de las terapias bioidénticas y funcionales que no sólo son visibles en el aspecto físico, sino también en su estado anímico a sus 82 años de edad, y en el buen funcionamiento de su organismo y en la potencialidad de su mente.
La medicina funcional, a diferencia de la medicina convencional, considera que la salud está en función de múltiples factores como la herencia genética, los agentes infecciosos a los que se expone, de sus hábitos de alimentación, de la actividad física que realice, así como de la calidad de sueño que tenga.
De igual forma, de su habilidad para manejar el estrés, de su patrón emocional que pueda lograr y de la calidad o toxicidad del medio ambiente y magnitud electromagnética que rodea a una persona, todos estos elementos influyen de diferentes formas en la salud de las mujeres, y no solo depende de la fisiología corporal, es decir, analiza los posibles y múltiples factores que merman la salud.
El tratamiento que ofrece Centro Engel y que ha sido comprobado exitosamente a lo largo de estos 40 años, consiste en combinar diferentes terapias con hormonas bioidénticas, alimentación de acuerdo al grupo sanguíneo, programas de destoxificación ambiental, equilibrio de neurotransmisores y salud cerebral, tratamiento especializado para mujeres sin matriz ni ovarios, nutrición personalizada, control del estrés y sueño así como nutrición individualizada para restablecer la función femenina y frenar el deterioro múltiple de la menopausia.
“Nosotros utilizamos la medicina funcional porque nos permite observar la salud y capacidades de cada mujer, en su totalidad. Los cuatro pilares de la salud en los que se enfoca esta ciencia son: la salud gastrointestinal, el funcionamiento endócrino y metabólico, el control de la inflamación y la salud cerebral. La combinación y funcionamiento óptimo de estos cuatro pilares de la salud, son lo que nos permite curar y tratar del 70 al 80 por ciento de las enfermedades”, declaró María Engel.
Fundado en 1982, el Centro Engel es la primera clínica en su género especializada en menopausia en América Latina. Su enfoque basado en la medicina funcional le ha permitido tratar de forma exitosa a más de 400 mil mujeres a lo largo de los años.
En el evento estuvieron también la Nutrióloga Gysel Engel, Gerente General de Centro Engel, y las doctoras Consuelo Cruz, Graciela Herrera, Marisa Posadas y Patricia Rivera, todas con una destacada trayectoria en el manejo, cuidado y control de la menopausia, quienes reúnen la mayor experiencia del país en el manejo natural de la menopausia, quienes durante el panel de expertas “La Menopausia en México”, destacaron la importancia de acercar a un mayor número de mujeres tratamientos que no solo se ocupen de controlar la menopausia sino que les permitan aumentar su calidad y esperanza de vida.