Población mexicana con altos niveles de colesterol y triglicéridos en sangre

Se realizó la IV Cumbre Latinoamericana del Colesterol

Redacción
Bienestar
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Olga Yastremska

Carlos Alberto Aguilar Salinas, médico adscrito de la Unidad de Investigación en Enfermedades Metabólicas del Instituto Nacional de Nutrición Salvador Zubirán (INCMNSZ), expresó que las familias sufren el impacto económico y social que representa los padecimientos como son la cardiopatía isquémica, la diabetes y la enfermedad renal crónica. Sin embargo, ante los esfuerzos gubernamentales, las enfermedades metabólicas siguen siendo las principales causas principales de muerte en México.

El 17.7% mexicanos tiene una concentración alta de triglicéridos y colesterol que ponen en riesgo de tener enfermedades cardiovasculares. Aunado a las variantes genéticas de la población que explican la alta prevalencia de colesterol.

Por tal motivo, los ponentes explicaron que los medicamentos deben de estar accesibles para el médico de primer contacto, sin embargo, están accesibles para la segunda atención para los pacientes. Por ello es necesario que los médicos de primer contacto deban tener el entrenamiento y acceso para proscribir los fármacos requeridos para los enfermos.

A pesar de los bombardeos mediáticos y publicitarios de los alimentos de baja calidad nutrimental. Cada uno de los voceros de cada institución de salud de América Latina concordó en que se debe de transmitir la información correcta a la población en cuanto a los alimentos saludables. Y aprovechar las efemérides internacionales como el Día Mundial del Corazón para generar un impacto positivo en la sensibilización del público en general.

Con respecto a las acciones de cada gobierno, en la IV Cumbre Latinoamérica del Colesterol se expuso que una política sin un anclaje en lo territorial no funciona. Se necesita una interacción integral con los profesionales de la salud y las autoridades gubernamentales para transformar la calidad de vida de las personas con la perspectiva de una mayor incidencia en hábitos saludables.

En la IV Cumbre Latinoamericana del Colesterol, organizada por Pacientes de Corazón (PACO), la Sociedad Mexicana de Cardiología y la Fundación Mexicana del Corazón, se dio a conocer las acciones y estrategias para que los sistemas del sector salud de los países de América Latina evolucionen frente a la actual crisis de salud.

Durante las ponencias se resaltó el trabajo de las Asociaciones, pues tratan de buscar las acciones necesarias para cambiar las perspectivas en el tratamiento de las enfermedades cardiovasculares. Una de ellas es incidir en las políticas públicas y en los programas de reactivación física para la población en general.

La IV Cumbre Latinoamérica del Colesterol convocó a expertos nacionales e internacionales, pacientes y familias de América Latina, para abrir el diálogo en la región sobre las acciones para contrarrestar el “colesterol malo”.

Entre los padecimientos que integran las ECV, requieren atención especial las dislipidemias, y específicamente los niveles altos de LDL (el llamado “colesterol malo”) e hipercolesterolemia, que se correlaciona en forma directa con el aumento en la incidencia de la aterosclerosis o depósito de colesterol en las arterias, infarto del miocardio, infarto cerebral y muerte cardiovascular.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que de aquí a 2030, casi 23,6 millones de personas morirán por alguna enfermedad cardiovascular (ECV), principalmente por cardiopatías y accidentes cerebrovasculares. Se calcula que en 2015 murieron por esta causa 17.7 millones de personas, lo cual representa un 31% de todas las muertes registradas en el mundo.

El presidente de la Asociación PACO A.C., Carlos Castro, resaltó que lo más importante de esta cumbre fue la posibilidad de reunirse en el nuevo formato virtual paran seguir comunicando los temas de salud fundamentales en pro de los pacientes, pero es especifico tratar el tema del colesterol.

Por otro lado, se invitó a proponer acciones en beneficio de los pacientes, redoblar los esfuerzos para hablar y prevenir sobre la enfermedad silenciosa de hipercolesterolemia familiar, y continuar con acciones de prevención secundaria en pacientes post-infartados que se encuentran en peligro latente.

Finalmente, los participantes destacaron que la IV Cumbre Latinoamericana del Colesterol, invitaron a los gobiernos, las asociaciones, y el público en general a no regresar a una nueva normalidad, sino a una reconstrucción de los sistemas de salud para mejorar la calidad de vida de los pacientes de la región.