¿Te imaginas no poder dormir, hacer ejercicio, desempeñar tareas cotidianas e incluso caminar? Estos impedimentos pueden ser consecuencia de padecer algún tipo de dolor, que representa un problema de salud pública, especialmente el dolor crónico, pues se estima que en México alrededor de 28 millones de personas lo sufren.
Sentir dolor de intensidad moderada a severa es síntoma de alguna enfermedad y es una de las causas más frecuentes por la que se acude al médico. Debido a sus diversas manifestaciones clínicas, intensidad y duración, el dolor es una entidad patológica compleja, que requiere ser estudiada cuidadosamente para dar el tratamiento correcto ya que existen muchos tipos de dolor (nociceptivo, neuropático entre otros).
Rocío Guillén Núñez, especialista en Algología, (rama de la medicina que se encarga del estudio y tratamiento del dolor) señaló que “el dolor agudo es intenso, se presenta rápidamente y puede durar poco; permite saber que puede existir alguna lesión o que se tiene un problema que hay que atender de forma rápida”.
Por otro lado, el dolor crónico, “se manifiesta en forma persistente durante un largo período y causa limitación para realizar actividades, alteraciones del bienestar social y del estado de ánimo de quien lo padece”.
De acuerdo con el especialista en dolor, Ángel Juárez Lemus, miembro de la Asociación Mexicana para el Estudio y Tratamiento del Dolor, “sentir algún tipo de dolor es un aviso de que algo está mal; si no es tratado, puede afectar la calidad de vida de quienes lo padecen, incluso en aspectos cotidianos:
Limita la capacidad de funcionamiento (dormir, trabajar, realizar tareas domésticas)
Hace más lenta la recuperación después de una enfermedad o cirugía.
Interfiere con la capacidad del cuerpo al momento de combatir infecciones.
Altera el estado de ánimo, hay más probabilidades de sentirse triste, frustrado, ansioso, enojado o deprimido
El dolor es una serie de experiencias emocionales y cognitivas, las cuales no son placenteras, y aunque mucho depende de las circunstancias, el dolor no siempre es curable. Sin embargo, hay tratamientos farmacológicos y no farmacológicos que pueden ayudar al alivio de este padecimiento, precisó el especialista.
El alivio del dolor fue clasificado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como un derecho humano, por lo que diversas instituciones de salud buscan la forma más adecuada para manejarlo y controlarlo, y con esto devolverle al paciente una buena calidad de vida.
La empresa Asofarma cuenta con un portafolio de medicamentos para el tratamiento de diversos tipos de dolor y recomienda que, ante cualquier molestia, se acuda al médico para determinar el origen de la enfermedad.
Sentir dolor crónico altera la calidad de vida
Cada 17 de octubre se conmemora el Día Mundial contra el Dolor
