Sin duda la información y el conocimiento constituyen uno de los ejes de desarrollo más importantes del mundo y los expertos consideran que en este marco la web es tanto una herramienta como una fuente de erudición en sí misma: al potenciar el uso de la red global se propicia una circulación informativa notable, con lo cual se construye una firme infraestructura para las sociedades de hoy y de mañana.
Y es que las Tecnologías de la Comunicación y la Información (TIC) no solamente han modificado el estudio y el acceso a la ciencia, la tecnología y la industria, sino todas las actividades de la vida humana: la cultura, el comercio, la diversión, la educación…
Esta red global de redes informáticas que opera a través de plataformas de comunicaciones fijas e inalámbricas proporciona una comunicación multimodal e interactiva, sin límites espaciales y momentáneos, así como de universalidad.
Tal es el impacto de internet en la sociedad, que registra dimensiones nunca vistas y casi inimaginable hasta no hace mucho tiempo.
La tecnología de internet, sin embargo, no es algo nuevo: en 1969 se desarrolló su antepasada, la Arpanet. Reservada en un principio para tareas militares y ministeriales, se liberalizó su uso por los particulares en los noventa. Se propagó rápidamente y ya en 1996 había 40 millones de usuarios.
A pesar de que a estas alturas se podría decir que casi toda la humanidad está conectada, existen grandes diferencias por regiones, no solo en cuanto a disponibilidad de dispositivos sino también respecto de la capacidad o ancho de banda, precio de los servicios y eficiencia.
Igualmente, el avance en la disponibilidad de dispositivos no cierra todavía la brecha social ni la digital entre países desarrollados y subdesarrollados.
En el Día Mundial de Internet el informe digital de We Are Social Hootsuite 2021 indicó una penetración digital de 95% en el norte de Europa frente a 36% en África occidental.
Aun así, en Europa, Asia, América Latina y África quedan zonas sin cobertura telefónica que las operadoras consideran poco rentables a la vez que, paradójicamente, se incrementa el debate sobre la llegada de la red 5G, su uso entre la población y los distintos niveles sociales.
Para reflexionar sobre cómo internet puede contribuir a conseguir los Objetivos de Desarrollo Sostenible y en torno de la cual se suceden los mensajes que alertan sobre las bondades y los peligros de la red de redes, la Organización de Naciones Unidas (ONU) propuso en 2005 fijar el 17 de mayo como el Día Mundial de las Telecomunicaciones y Sociedad de la Información o Día Mundial de Internet.
Así, en días pasados el mundo celebró esa fecha con un tema central de debate: Internet, palanca de transformación digital y resiliencia.
Por ello con esta conmemoración se busca impulsar cambios positivos y hacer conciencia en los usuarios sobre las capacidades para superar cualquier causa adversa con base en esta tecnología, así como utilizarla de manera responsable, respetuosa y crítica.
Internet en el mundo
La declaración de la Organización mundial de la Salud (OMS) en el sentido de que el coronavirus era oficialmente una pandemia a nivel internacional el 11 de marzo de 2020 puso de manifiesto el papel fundamental de internet para poder dar continuidad al funcionamiento de muchas empresas y servicios durante la crisis sanitaria.
La relevancia de la web nunca antes fue mayor, ya que el confinamiento que causó por la pandemia y los cambios de hábitos con relación al consumo, trabajo, estudios y relaciones interpersonales se enfocaron en utilizar la red de redes para satisfacer la mayor parte de las necesidades en todo el planeta.
Mientras que nuevos usuarios trataban de adaptarse a los nuevos desafíos digitales planteados por el Covid-19, los existentes se adaptaron a nuevas herramientas digitales.
El informe digital de We Are Social Hootsuite 2021 señala que el número de usuarios de internet en el mundo alcanzó hasta enero de este año los cuatro mil 660 millones de personas, que representa 59.5% de la población mundial, estimada en siete mil 830 millones de habitantes.
De acuerdo con las cifras del informe las dos regiones con mayor penetración de internet actualmente son el norte de Europa con 96% y Europa Oriental con 93%, seguidas por Norteamérica con 90%. Cabe destacar que México no figura en esta lista.
Por otro lado, las regiones con menor penetración de internet son África Central con 22% y África oriental con 24 por ciento.
Brasil es en América Latina el país con el mayor número de usuarios en la red, con 160 millones. México se ubica en el segundo lugar de la región, con 92 millones de usuarios online. Lo siguen Argentina con 36 millones de usuarios y Colombia con 34 millones.
El estudio agrega que hasta enero de 2021 los usuarios únicos desde dispositivos móviles alcanzaron 66.6% de la población en el mundo, es decir, cinco mil 220 millones de personas, lo que representa 1.8% más en comparación con enero de 2020: un incremento de 93 millones de usuarios.
Respecto de las redes sociales el número de usuarios es de cuatro mil 200 millones de personas, es decir, 53.6% de la población mundial. Este número de usuarios activos de redes sociales se incrementó en los últimos doce meses 13.2%, es decir, 490 millones de personas.
Conectividad
Actualmente el mundo se encuentra frente a una fuerte digitalización en que se exige cada vez mayor rapidez en los procesos de transformación digital, así como la universalización del acceso a las tecnologías digitales.
Y es cierto, dicen los especialistas: es importante que haya una democratización de la tecnología y la brecha digital sea cada día más corta entre las comunidades, los países y las regiones. Este es uno de los aspectos clave que involucra la celebración del Día Mundial de Internet: “reducir la brecha digital”, tema en el que todavía hay mucho trabajo por hacer.
De acuerdo con los expertos, desde que comenzó la pandemia de coronavirus se logró conectar a internet a dos tercios de la población de América Latina, sector en el que predomina la banda ancha móvil con 67.5%. Las mayores brechas se dan entre zonas urbanas y rurales: unos 40 millones de hogares no están conectados y 32 millones, es decir, 46% de los niños de cinco a doce años no pueden hacer teleducación; 79% de los ocupados se desempeña en actividades que no pueden hacerse vía remota o trabajo en casa, entre otros datos relevantes que marcan una profunda desigualdad contra la cual se necesita más inversión por parte del sector público y privado.
Al mismo tiempo que se aceleraron los procesos de penetración y transformación digital, permitiendo que muchas personas accedan a internet para realizar actividades que antes eran presenciales, también aumentaron los peligros.
La falta de conocimiento en el uso de los dispositivos y de los riesgos que significa estar conectados a la red puso al descubierto la ausencia de un adecuado proceso de maduración de los nuevos usuarios.
A pesar del crecimiento del uso de internet hay países donde la población está conectada casi el día completo, mientras en otros persiste una penetración más lenta.
El documento de We Are Social Hootsuite indica que los países con mayor penetración de internet son los Emiratos Árabes Unidos con 99% de penetración, seguido por Dinamarca y Suecia con 98%. En tanto, los países con menor penetración son Corea del Norte con 0.1%, Eritrea con 6.9% y Sudán con 8 por ciento.
México
Nuestro país llegó al festejo del Día Mundial de Internet con la ambiciosa meta de garantizar Internet para todos, un programa que se retrasó al menos hasta 2023 debido a las complicaciones por la pandemia.
Ramiro Tovar, profesor de Economía del Instituto Tecnológico Autónomo de México (ITAM), señala que “a mitad de este sexenio aún no existe estabilidad institucional ni financiamiento constante para proyectos públicos y privados que permitan alcanzar dichas metas en cuanto a conectividad”.
Elena Estavillo, presidenta de la agrupación Conectadas, indica por su lado que “no es necesariamente malo ponerse metas ambiciosas; es importante, porque la necesidad es muy apremiante debido a que las comunidades sin acceso tampoco tienen otros servicios públicos y están en una situación de mucha marginación”.
Y es que el diagnóstico del gobierno federal es que solo 25% del territorio nacional está comunicado por internet por “los atrasos de la corrupción del neoliberalismo” y el interés económico de las empresas privadas.
Por ello desde 2019 se creó una filial de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) llamada CFE Telecomunicaciones e Internet para todos, que invertirá once mil millones de pesos para dar el servicio.
La meta es que para 2025 se encuentren habilitados 200 mil puntos de acceso a internet gratuito, extender los servicios de red y banda ancha a cerca de 130 mil localidades y adecuar infraestructura para generar una gran capacidad de transporte de datos.
Aunque Estavillo coincide en que no es un secreto que para las empresas no es rentable comunicar a las comunidades más apartadas, advierte acciones desarticuladas del Estado. “CFE no es una autoridad: es una operadora estatal y ahí pareciera haber una confusión tremenda porque no tiene facultades para hacer política pública, no es una secretaría de Estado”, apunta.
Estavillo cuestiona la desaparición de la Subsecretaría de Telecomunicaciones y el debilitamiento de otros organismos encargados de la digitalización en medio de un momento disruptivo ocasionado por la pandemia. “No vemos un plan integral de digitalización del país; no tenemos una estrategia nacional; aunque para algunas comunidades se cumpla la meta de llevar el internet, llegará a un lugar donde muy probablemente la población no tenga habilidades digitales”.
El profesor Tovar señala que las primeras deficiencias para un internet amplio en el país surgieron con la reforma de telecomunicaciones de 2013, impulsada por el gobierno anterior. “Fue eminentemente de carácter regulatorio y dejó un hueco enorme sobre mecanismos inmediatos para promover la penetración y la cobertura de los servicios de telecomunicaciones en el territorio nacional, no se incluyó ningún esquema institucional”.
Internautas en México
La edición número 17 del Estudio sobre los hábitos de los usuarios de internet en México 2021, presentado por la Asociación de Internet MX, a 2020 en el país existen 86 millones 800 mil internautas, lo que representa 76.3% de la población de seis años o más. De ellos, 52.6% de usuarios son mujeres y 47.4% hombres.
Durante 2020, y a consecuencia del confinamiento, los usuarios de internet tuvieron el mayor crecimiento observado en los últimos cinco años con un aumento de 10.2% anual.
El informe agrega que durante el confinamiento 11% de la base total de internautas aumentó su gasto en internet durante este periodo.
Asimismo, durante el año pasado, el hogar fue el principal lugar de uso de internet y donde 90.9% de los usuarios se conectaron desde ese punto.
Aunque WhatsApp y Facebook, agrega el documento, continúan mostrando la mayor preferencia de mexicanos en redes sociales, se diversifica el uso de otras generando atomización en el número de plataformas utilizadas.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) señalan que solo 44.3% de los hogares tiene computadora y 56.4% conexión a internet.
El celular es la tecnología con mayor penetración en México, con 86 millones 500 mil usuarios, 75.1% del total de la población, de los que 88.1% usa un celular inteligente o smartphone, señala el INEGI.
A la par de las actividades que hacen los mexicanos conectados a la red, otros datos que arroja el reporte son los medios de conexión, entre los que el smartphone es el rey. Los dispositivos de conexión más utilizados por los mexicanos son el celular, la laptop o computadora de escritorio, consolas de videojuegos y tabletas, respectivamente.
Hasta la fecha existen 115 millones de líneas telefónicas con conexión a internet inalámbrico, lo que significa 89.1% de toda la población nacional.
Comercio electrónico
Frente al actual contexto en el mundo por la pandemia de Covid-19, las personas encaran nuevos retos debido a una situación completamente atípica, en la que la mayoría se encuentra todavía confinada en sus hogares. Estas batallas son aún más grandes para los negocios de sectores que no son de primera necesidad, al estar imposibilitados de operar en puntos de venta físicos; por ello el e-commerce o comercio electrónico se ha vuelto un modo de supervivencia para estos mismos.
No obstante, a la par de esta crisis se manifiestan cambios radicales en los hábitos de consumo de las personas a consecuencia del distanciamiento social, la desestabilización económica e incluso las adecuaciones en el entorno laboral, que marcarán la pauta de una nueva economía digitalizada que según expertos persistirá aun después del confinamiento y contribuirá al crecimiento del comercio digital.
En México, previo a la pandemia, el comercio electrónico ya contaba con un gran desarrollo y en 2019 la cantidad de ventas online mostró un crecimiento de 24% respecto del año anterior, de acuerdo con datos del Estudio de los hábitos de las compras en línea de los usuarios de internet en México.
Sin embargo, según los últimos datos publicados por la Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO) en 2021, referentes al cierre de 2020, el e-commerce en México creció 81% y facturó 316 mil millones de pesos. Esta cifra ya representa 9% de todas las ventas de retail (venta de productos al consumidor final) en el país.
Por otra parte, un informe de la Agencia de Naciones Unidas para el Comercio y el Desarrollo (UNCTAD) muestra la evolución del comercio electrónico en los últimos dos años y el impacto de la crisis sanitaria en el sector, cuyas ventas a nivel mundial ya se elevaban a 26.7 billones de dólares en 2019, es decir, 4% más que el año anterior. No obstante, el impulso que la pandemia dio a las ventas en línea en 2020 podría representar ya 19% de las ventas totales globales.
Por volumen bruto de mercancías la empresa china Alibaba es la primera en comercio electrónico a nivel mundial y volumen de ventas subió 20% en 2020, según datos preliminares.
A continuación se ubican Amazon en Estados Unidos, que registró un aumento del 38%, las empresas chinas JD.com y Pindouduo, y la canadiense Shopify, con crecimientos de 25 y 65%, respectivamente.
Sobre las razones por las cuales las compañías de venta en línea tienen un desempeño relativamente bajo en los países en desarrollo (con excepción de China), el informe explica que la principal es que llevan pocos años funcionando.
Derecho de acceso
El derecho de acceso a internet es reconocido por la ONU como un derecho humano fundamental de las personas, vinculado a la libertad de expresión.
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la CIDH establece que el derecho de acceso a internet debe garantizar la conectividad y el acceso universal a la infraestructura de la web y a los servicios de las TIC de manera equitativa, económicamente accesible y con una calidad adecuada.
En tal sentido, los estados y naciones de todo el mundo deben garantizar el acceso a internet sin restricciones, entre otros derechos humanos fundamentales, previendo en su normativa legal y jurídica:
a) Promover el acceso universal a internet para garantizar el disfrute de derechos humanos como la libertad de expresión, la educación, la atención de la salud y el trabajo.
b) Generar mecanismos regulatorios que fomenten el acceso a internet, especialmente en las poblaciones más vulnerables, zonas rurales y áreas alejadas de los centros urbanos.
c) Promover puntos de acceso públicos a TIC. Hacer conciencia en la población sobre el uso adecuado de internet, así como de sus beneficios.
d) Asegurar el acceso equitativo para personas con discapacidad y adultos mayores.
Fuente: ONU
Numeralia
Los usuarios de internet en el mundo pasan en promedio un total de seis horas y 54 minutos conectados a la red de redes cada día.
En el caso del tiempo de uso diario desde dispositivos como smartphones o tabletas y otros, pasó de un promedio de 37.7% del total de horas en internet en 2015 a más de la mitad (52.8%) en 2020.
Los usuarios de internet inalámbrico pasan en promedio tres horas y 39 minutos navegando desde sus smartphones. Esta cifra no incluye a los usuarios de redes sociales, pero sí a los usuarios que acceden vía WiFi y mediante conexiones de datos móviles.
Actualmente las regiones con mayor penetración de internet son el norte de Europa con 96% y Europa Oriental con 93%. Les sigue Estados Unidos con 90 por ciento.
Las regiones con menor penetración de internet son África Central con 22% y África oriental con 24 por ciento.
Fuente: We Are Social Hootsuite 2021