El Senado de la República hace historia: ante la persistencia de la pandemia sanitaria por Covid-19 los legisladores de la cámara alta aprobaron un acuerdo parlamentario que les permite ya legislar a distancia.
Este acuerdo regula el desarrollo de las sesiones tanto en el pleno como en comisiones. ¿Cuáles son los métodos acordados para ello? Videoconferencias seguras y también identificación digital.
De esta manera los senadores de la República estarán facultados para discutir y, muy importante, votar proyectos legislativos.
Y aquí viene un punto bastante relevante, que de hecho era un tema sin resolver desde que en marzo del año pasado iniciaron los trabajos a distancia en el Congreso de la Unión: el trabajo en comisiones también incorpora medidas como la firma electrónica.
Recordemos que las actividades legislativas se consideran como esenciales y las reformas a nuestro marco jurídico para adecuar las leyes a la realidad que estamos viviendo e incluso para generar nuevos andamiajes jurídicos no pueden esperar.
Es así como se garantiza la continuidad de los trabajos en la cámara alta, por medio del uso de la tecnología.
Continuidad
Este acuerdo de la Junta de Coordinación Política del Senado de la República para la implementación de sesiones a distancia durante la emergencia de salud pública se alinea con el actuar de los Congresos a lo largo y ancho del mundo.
Múltiples países implementan diversas soluciones, tales como la presencia restringida de legisladores con derecho a voto, sesiones mixtas presenciales o a distancia e incluso la emisión de votos remotos o telemáticos para evitar la concentración de legisladores en plenos y comisiones.
El Senado mexicano, hoy, no es excepción. La innovación tecnológica nos lleva a transitar hacia un Senado más productivo, más reactivo, funcional. Porque es indispensable que nuestros legisladores sigan cumpliendo con sus responsabilidades, esas que les conferimos mediante nuestro voto.
Son buenas noticias que las coordinaciones parlamentarias se hayan puesto de acuerdo para garantizar la continuidad de los trabajos. Que la parálisis legislativa se combata con tecnología es esencial; ahora el reto será la transparencia, la certeza y la legalidad.
Importante tomar en cuenta que los trabajos a distancia no podrán modificar nuestra Carta Magna, es decir, no habrá reformas constitucionales a distancia. Tampoco se votarán a distancia temas que requieran mayoría calificada, es decir, las dos terceras partes de los legisladores. Ello deberá esperar a la reactivación de sesiones presenciales en el pleno.
Aquí en #DeUrgenteYObviaResolución estaré muy pendiente de este acuerdo fundamental para los trabajos legislativos que, recordemos, son esenciales.