Tal parece que Ana Gabriela Guevara, titular de la Conade, y Kiril Todorov, presidente de la Federación Mexicana de Natación (FMN), intentan secuestrar al deporte acuático nacional.
Y cómo no, si de ahí se han beneficiado. Aunque me dice un pajarito que en realidad Anita protege a Kiril porque el Comité Olímpico Mexicano (COM) aún no ha inhabilitado a Antonio Lozano como presidente de la Federación Mexicana de Atletismo, ya que fue hallado culpable por desvío de recursos.
¡Ay, Ana! Mejor lava tantito tu nombre poniéndole el ejemplo al COM y no intentes defender lo indefendible, porque esa es una de las peores acciones del ser humano.
Hace unas semanas le platicaba en este mismo espacio editorial que la Federación Internacional de Natación (FINA) inhabilitó a Kiril Todorov de la FMN por presuntos actos de corrupción y al mismo tiempo creó un comité de estabilización para manejar los deportes acuáticos en México hasta en tanto se realicen nuevas elecciones para designar al nuevo presidente de la FMN.
Sin embargo, esta acción de la FINA ha sido mediante una carta descalificada y desechada por Ana Gabriela Guevara; pero no solo eso, también amenaza a nuestros nadadores diciéndoles que si no se cuadran con las decisiones de la Conade respaldando a Kiril Todorov como presidente de la Federación Mexicana de Natación dejarán de recibir todo tipo de apoyos.
Así, entonces, los deportistas acuáticos mexicanos tienen dos caminos: aguantar sin recursos hasta que la Federación Internacional reconozca al nuevo presidente de la natación mexicana o ponerse una venda en los ojos e ir hacia la nada abogando por la corrupción severa que existe y fomenta la Conade.
Si yo fuera ustedes, queridas nadadoras y queridos nadadores del país, no me asustaría, aguantaba un poquito la falta de respaldo por parte de la Conade, que nada más está de metiche, y esperaría las determinaciones de los órganos que realmente cuentan y avalan sus resultados, que son la FINA y Federación Mexicana de Natación.
Ignorancia total
Cómo es posible que se hayan atrevido a desestimar las determinaciones de la Federación Internacional de Natación hacia el deporte acuático mexicano, cuando se tienen todos los argumentos y estatutos jurídicos para hacerlo.
Señora Guevara, señor Todorov, a continuación les dejo información que les hace falta leer y que tomo del conocimiento editorial del profesor Nelson Vargas, incansable impulsor del deporte acuático mexicano.
Como primer punto, el gobierno de la Federación Internacional de Natación es universal y su Constitución y Estatutos así lo establecen, dejando claro que esa entidad tiene plenos poderes sobre todos sus miembros (países afiliados) para hacer cumplir las normas establecidas, escritas, vigentes, aprobadas en sus congresos.
Por otro lado, en el apartado C10 del Reglamento FINA, indica “suspensión o terminación de la membresía”; en su inciso C10.3 establece que “la Mesa tendrá la facultad de expulsar o suspender a un miembro (entiéndase país) por violación de las Reglas FINA. El miembro respectivo puede apelar la decisión de la Mesa al Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS)”.
Otro inciso, el C10.6, establece que “en circunstancias excepcionales la Mesa puede designar un comité en la medida en que el órgano ejecutivo de un miembro no se adhiera a las prácticas de buen gobierno, transparencia, responsabilidad financiera y estabilidad o ponga en riesgo la organización y desarrollo de las actividades acuáticas en su país”.
El mandato del comité de estabilización puede incluir lo siguiente:
C10.6.1 Gestionar los asuntos diarios del miembro.
C10.6.3 Revisar y modificar los estatutos.
C10.6.4 Organizar y realizar elecciones.
¿Les quedó claro?