¡Voy al grano! La Federación Mexicana de Natación tiene más de diez años de ser manejada literalmente con las patas, con modales de corrupción y cinismo total. Y, ¿quién es el responsable de todo ello? Se llama Kiril Todorov, titular de dicho organismo.
En la última década el señor Todorov y sus colaboradores se han encargado de ridiculizar el deporte acuático de nuestro país con actos dignos de un castigo potencialmente ejemplar, pero como en esa gestión se han sabido repartir la lana los atropellos pasan increíblemente desapercibidos.
La lista de acciones tramposas, alevosas, corruptas y equivocadas es tremendamente amplia. Por ejemplo, una a gran escala de vergüenza fue la anulación del Campeonato Mundial de Natación que se iba a desarrollar en Guadalajara en 2017, pero dos años antes del evento, es decir, en 2015, el señor Todorov decidió, ¿por qué no?, cancelar todo argumentando que era imposible realizarlo por falta de recursos y apoyo, cuando la realidad era que sí había dinero, pero se lo acabaron sabrá Dios cómo y en qué tipo de cosas.
De hecho esa negativa derivada de la mala operación rumbo a esa Copa Mundial de Natación propició que la propia Federación Internacional, la Fina, multara al deporte acuático de nuestro país por cinco millones de dólares.
Otras maniobras macabras del señor Kiril Todorov son: cobrar cuotas muy altas a deportistas para poder competir; cambiar los formatos de competencia a su conveniencia; alterar el proceso de afiliaciones y, lo que es peor, desinteresarse por la salud de los deportistas acuáticos como ocurrió en 2018, cuando más de 400 atletas tuvieron afectaciones y daños físicos por nadar en albercas contaminadas en el Campeonato Nacional de Curso Corto efectuado curiosamente en Guadalajara. A pesar de ello Todorov y compañía decidieron continuar con el evento sin importar las complicaciones de salud que presentaban los jóvenes.
¡En fin! Hasta aquí le dejo porque la lista de verdad es kilométrica…
Auditorías
Por cierto, creo que bien vale la pena aclarar que los buenos resultados en los últimos diez años en el deporte acuático de nuestro país son gracias al esfuerzo de los atletas y sus familias, ello complementado por el buen trabajo de algunos entrenadores que se han tenido que fajar nadando literalmente contra corriente.
¿Cuándo terminará el pavoroso trabajo que persiste en la Federación Mexicana de Natación? Sinceramente, no lo sé. Pero una buena noticia me llegó hace unos días y se trata de que al señor Kiril Todorov ya lo auditan las autoridades correspondientes, lo que quiere decir que muy probablemente le saquen los trapitos al sol, así como lo hicieron con la señorita Ana Gabriela Guevara, aún titular de la Conade.
Además debo decirle que en diciembre próximo habrá elecciones para determinar el futuro de la Federación Mexicana de Natación. Sé que el propio Todorov aspira a ampliar su mandato, pero quién sabe si salga bien librado de las auditorías. Otros que tienen chance de hacerse del cargo de la FMN son el legendario nadador mexicano Felipe Muñoz y el icónico clavadista Fernando Platas, este último ganador de la medalla de plata en el trampolín de los tres metros en los Juegos Olímpicos de Sídney 2000, entre otros importantes logros.
Urge que la Federación Mexicana de Natación tenga muy pronto un nuevo líder, una persona transparente, honesta, que conozca del tema, pero sobre todo que tenga calidad moral para así propiciar que las aguas se estabilicen.