FINGIDA FELICIDAD

“Una sonrisa es únicamente una apertura para interactuar socialmente”.

Daniela Suárez
Columnas
DANIELA SUÁREZ

Se ha dicho que las posturas de poder nos ayudan a construir confianza. Tal vez antes de una presentación, si nos sentimos nerviosos, podemos adoptar una postura para sentirnos más tranquilos. Pero ¿qué sucede cuando fingimos una sonrisa? ¿Será que nos sentimos más felices en automático? ¿O más bien nos sentimos en hipocresía por fingirla?

Un nuevo estudio publicado en el diario Nature Human Behaviour se dio a la tarea de investigar si el hecho de adoptar una expresión de felicidad en realidad nos la brinda y si es que en verdad adoptar poses faciales felices influencian sentimientos de alegría.

Para el estudio los expertos dijeron a los participantes que estarían colaborando en un experimento sobre cómo los movimientos físicos influenciaban el rendimiento al resolver problemas matemáticos para no sesgar los resultados. Y, de hecho, a cada grupo de los más de tres mil 800 participantes se le dieron instrucciones distintas.

Algunos de ellos tuvieron que copiar las expresiones neutrales o felices de fotografías de actores. Otros recibieron instrucciones de qué hacer con sus músculos faciales para copiar una sonrisa. Un tercero más sostuvo un lápiz con sus dientes (en una sonrisa), mientras que un grupo más lo sostuvo en sus labios en una pose neutral.

Cada pose fue sostenida por los participantes por cinco segundos y al mismo tiempo cada uno de ellos veía imágenes positivas, como fotografías de flores, arcoíris o gatitos.

Después de cada tarea los voluntarios completaron un cuestionario donde se les preguntó sobre sus niveles de felicidad y si disfrutaron hacer el ejercicio. Para mantener el pequeño engaño del estudio los participantes también resolvieron problemas matemáticos. Al terminarlos, también contestaron preguntas sobre lo que creían que era el objetivo del experimento.

Influencia social

Los resultados indicaron que la retroalimentación facial sí influyó en los sentimientos de felicidad. Pero una “sonrisa” se asoció con una mayor felicidad únicamente cuando se copió la cara del actor o se creó mediante un movimiento voluntario de los músculos faciales. Cuando la “sonrisa” se creaba sujetando un lápiz entre los dientes se percibieron pruebas equívocas de un sentimiento de felicidad.

Además de esto los efectos sobre la felicidad se produjeron independientemente de que los participantes vieran también imágenes positivas, lo que sugiere que una expresión de sonrisa puede iniciar por sí misma sentimientos de felicidad.

De acuerdo con los investigadores estos resultados sugieren que simplemente sonreír viendo nuestros reflejos por tan solo cinco segundos frente a un espejo cada mañana podría ayudar a reducir estrés, mejorar nuestro bienestar en general y aliviar la depresión.

Además de esto, los investigadores cuestionaron si realmente una sonrisa es una señal de felicidad, ya que existe una teoría que indica que nuestras expresiones faciales se comprenden como herramientas de influencia social y en este sentido una sonrisa indicaría que es únicamente una apertura para interactuar socialmente en vez de ser un indicador de felicidad.

Sin embargo, considero que aun cuando sea que la finjamos para mejorar nuestro propio humor, de vez en cuando una sonrisa personal nos puede sin duda ayudar. Y tú, ¿qué tanto sonríes?