QUE SE ACABÓ LA CORRUPCIÓN; SOBORNOS A PANISTAS

Félix Fuentes
Columnas
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El anuncio constante de eliminar a la corrupción condujo al dicho de “ya se acabó” y algunas autoridades exigen que no se mencione en adelante.

Sin embargo esa práctica viene de decenios ¿o de siglos? y se hizo costumbre. Prevalece y destaca en las denuncias diarias, tanto civiles como penales. El sentir general es de que llegó para quedarse y de que donde hay dinero y negocios los malos manejos proliferan. En cada evento los ciudadanos procuran ganar. Nadie quiere quedarse en el lugar de los perdedores. “No te bajes de la cama por el lado equivocado”, reza un dicho.

En política es común escuchar que el PRI arrolló durante ocho décadas mediante manejos oscuros, con trampas electorales y bajo el signo de la corrupción. Esa fama fue aprovechada por el Partido Acción Nacional y fue común escuchar la honradez de sus integrantes.

Con los nuevos partidos, entre otros el PRD, el Verde Ecologista, el PARM y el PPS, abundaron los malos manejos. Incurrieron en manejos similares a los del PRI o peores y se extendió la frase de “todos son iguales”.

El PRD acumuló una sarta de críticas debido a sus prácticas y se le imputaron eventos electorales de la más baja estofa. A la fecha carga con buena parte de tan mala fama.

Acción Nacional cayó de su pedestal y le sumaron manejos similares a los del PRI. Así se explica la frase de PRI-AN, la cual hizo suya el primer mandatario Andrés Manuel López Obrador, quien dirige fuertes críticas a ambos partidos. A la fecha insiste en que el PAN le robó la sucesión presidencial en la que fue proclamado Felipe Calderón.

Latrocinios

Una página negra de Acción Nacional fue detallada en días recientes, pero tuvo lugar en 2014, cuando un grupo de destacados panistas recibió sobornos de Petróleos Mexicanos hasta por 52 millones de pesos para que aprobaran la reforma energética en el sexenio del priista Peña Nieto.

El panista Rafael Caraveo Opengo fue exhibido cuando recibió un soborno en efectivo del caso Odebrecht y eso lo obligó a reconocer que en siete ocasiones acudió a unas oficinas de Pemex en Montes Urales 425, Lomas de Chapultepec, a recibir 15 maletas llenas de dinero.

Cuando eso sucedió Caraveo era secretario técnico de la Comisión de Administración del Senado de la República y, por instrucciones del entonces senador del PAN Jorge Luis Lavalle Maury, recibió el dinero, supuestamente para campañas electorales de su partido.

En las oficinas de Montes Urales hacía las entregas Francisco Olascoaga, jefe de un Departamento Administrativo de Pemex y hombre de confianza de Emilio Lozoya, principal involucrado en el escándalo de la firma brasileña Odebrecht.

Según Caraveo por órdenes del entonces secretario de Hacienda, Luis Videgaray, se entregaron los 52 millones a los senadores del PAN Ernesto Cordero, Salvador Vega, Francisco García Cabeza de Vaca, Francisco Domínguez y el jefe de Caraveo, José Luis Lavalle.

Este es un caso de evidente corrupción mediante la disposición del dinero de Pemex en beneficio de funcionarios de Acción Nacional. Abundan los latrocinios en agravio de los fondos públicos y la corrupción se eterniza.