¿Fascismo de izquierda?

Guillermo Fárber
Columnas
 ¿Fascismo de izquierda?
Foto: Creative Commons/Jeffrey Beall

Tengo algunos amigos economistas que son keynesianos; la mayoría de ellos, de hecho. Los aprecio de todos modos. Prácticamente todos ellos se consideran “de izquierda” y consecuentemente abominan del fascismo (ideología típicamente “de derecha” a su ver).

Pero encontré esta curiosa referencia del fascista más fascista de todos los fascistas, el inventor mismo del fascismo; Benito Mussolini, dictador de Italia de 1922 a 1945 y admirado por Hitler. Don Benito (bautizado así en honor de Juárez, por cierto) dijo: “El fascismo concuerda enteramente con Mr. Maynard Keynes, a pesar de su supuesta posición como liberal. De hecho, su excelente y breve libro The end of Laissez-Faire (El fin del Laissez-Faire, 1926, http://www.eumed.net/cursecon/textos/keynes/final.htm) puede servir como un útil resumen de la economía fascista. Casi no hay nada que objetar en ese pequeño ensayo, y sí mucho qué aplaudir. Son premisas fascistas químicamente puras”.

Así como hay comunistas de derecha, también hay fascistas de izquierda. Ambos se dicen enemigos mortales, pero en realidad son hermanos de leche —la leche del Estado.

“El comunismo nunca pudo ser, nunca quiso ser y nunca fue de izquierda. Eso lo dejó perfectamente establecido Vladimir Ilich Ulianov, alias Lenin, en un ensayo titulado El izquierdismo: enfermedad infantil del comunismo. El comunismo es derecha pura y dura, la peor por su posición totalitaria, intolerante al estilo del Santo Oficio español del siglo XVI, persecutorio inclusive del potencial pensamiento crítico de los individuos. Es un sistema criminal, dirigido por fanáticos y depravados al estilo del inefable Laurenti Beria y su jefazo adorado, el Koba Stalin. Ancestralmente, la ultraderecha ha inventado y financiado a la izquierda, que no es sino sirvienta de la dictadura globalista totalitaria”.

La misma gata

Pero nadie tiene por qué sorprenderse: el fascismo es una doctrina colectivista, corporatista, estatista, como también lo son el comunismo, el socialismo y doctrinas similares dizque confrontadas. “Las ideas socialistas de Keynes han sido estudiadas y adoptadas por la Unión Soviética, la Italia fascista, la Argentina de Perón, la India de Nehru, la Yugoslavia de Tito, la Rumania de Ceausescu, la Cuba de Castro y el Estado de Israel”. Y el México de Echeverría, habría que añadir.

Todos los “ismos” autoritarios son esencialmente colectivistas y la diferencia entre ellos “de izquierda” o “de derecha” es meramente secundaria, si no es que de plano completamente falaz; todos ellos comparten una característica esencial: la supremacía del Estado sobre el individuo. “Todo por el Estado, todo dentro del Estado, todo para el Estado, nada fuera del Estado”.

En la clasificación maniquea de la “lucha de clases” ser de izquierda es estar por las masas y contra las oligarquías, mientras que ser de derecha es estar por las oligarquías y contra las masas. Los de arriba y los de abajo, pues. Fórmula perfecta para la confrontación permanente donde el éxito político radica en prometer a los pobres que los defenderán de los ricos, y prometer a los ricos que los defenderán de los pobres.