“VIOLENCIA DE GÉNERO: IGUAL DE PELIGROSA QUE CUALQUIER PANDEMIA”

Lo Que Yo Quiero con Ivonne Acuña Murillo

Martha Mejía
Columnas
Ivonne Acuna - Cortesía Ivonne Acuna-2.jpg

Ivonne Acuña Murillo, feminista, catedrática de la Universidad Iberoamericana, consultora, columnista y conferencista experta en sistema político y género, platica en entrevista sobre la relevancia de difundir datos e información sobre violencia de género, al tiempo que equipara su gravedad con cualquier pandemia actual.

—¿Qué es el feminismo?

—Son muchas cosas: es filosofía, es teoría, es un movimiento social, es convicción de vida. Lo defino como un movimiento que lucha por que se reconozca la dignidad y la igualdad de las mujeres. Ojo, el feminismo no es contrario al machismo; este último se distingue por la misoginia, por el odio, el desprecio en el trato hacia las mujeres; el feminismo no pretende eso, por lo tanto no son equiparables como contrarios.

—Después de la marcha del 9 de marzo, ¿qué sigue para este movimiento?

—Lo que sigue es que el gobierno lo tome en serio. En palabras del presidente López Obrador, no es que esté desconociendo que existen los feminicidios, ni la violencia en contra de las mujeres: me parece que este gobierno no alcanza a comprender que no basta con cambiar las condiciones económicas o cambiar medianamente el modelo económico, como él dijo, para que se modifique la situación de las mujeres. La condición de nosotras es algo mucho más profundo, estructural, viene de siglos atrás y aunque sí se relaciona el modelo económico con esta cuestión de la interseccionalidad, es una cuestión transversal que atraviesa todas las actividades, sectores y rubros. Creo que es eso lo que el gobierno ha perdido de vista. La idea del movimiento en parte era eso, pero sobre todo levantar la voz en función del alarmante número de mujeres que son asesinadas, desaparecidas y violentadas.

No obstante, añade, “pasa que ahora el gobierno (federal, estatal, local) está ocupado lidiando con esta pandemia y desafortunadamente todas las otras luchas se acallaron, quedaron en la sombra. Ya ni los números nos dan sobre cuánta gente sigue siendo asesinada en el país todos los días, y de estos cuántas son mujeres”.

Urgencias

—¿Qué es lo más urgente por resolver en este tema?

—Lo urgente es atender la violencia doméstica que se reporta en estas semanas de encierro. También la desaparición de las mujeres jóvenes y los feminicidios; lo demás, por supuesto, requiere de trabajo y de tiempo prolongado para cambiar a una cultura para que haya equidad; para que, por ejemplo, no se discrimine en un trabajo o en las escuelas. Pero lo urgente es parar la violencia, las violaciones, los feminicidios y las desapariciones.

—En su opinión, ¿qué acciones podrían emprenderse para enfrentar esta situación?

—Que se dé más difusión. Existen instancias, sobre todo en la Ciudad de México. Aquí hay más organización. La jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, ha tomado muy en serio las protestas, a pesar de que al principio tuvo una respuesta inadecuada. Pero me parece que aprendió muy bien, escuchó el mensaje y trabaja con programas, estrategias y acciones para aumentar la seguridad. Y es que a la violencia de género habría que darle el mismo tratamiento que se le da al Covid-19: es una pandemia peligrosa para sensibilizar a la población, para informar de lo que pasa con las mujeres, para dedicar más recursos a seguridad, educación, sensibilización y seguridad pública.

—¿Cuál cree que sea el aporte de la academia en este tema?

—Desde la academia se hace investigación para identificar cómo el fenómeno ocurre y cómo evoluciona. Pero también desde la academia surgen voces o activistas. Por ejemplo, la antropóloga y filósofa Marcela Lagarde, una feminista destacada por su labor legislativa como diputada en la tipificación del feminicidio como un delito. Cada quien desde su trinchera contribuye para ir sumando y construyendo en este tema.