Nancy Núñez no es nueva en la lucha. Tiene más de 18 años participando en la vida pública: fue concejal, diputada, funcionaria y activista en defensa de los derechos humanos. Hoy como alcaldesa de Azcapotzalco impulsa una agenda de género que nace desde abajo, desde los barrios y las calles que conoce.
“Vengo de una colonia popular. Soy de Azcapotzalco. Toda mi vida en escuelas públicas. Toda mi vida desde abajo. Desde saber qué es lo que sí se requiere en nuestros pueblos. Y a veces era eso bien difícil, porque decían: ¿cómo llega alguien que es de un pueblo, de una colonia popular? Pues nosotras también podemos”, afirma.
Su historia conecta con la de muchas mujeres que hoy están tomando el poder. “Todavía hace algunos años se tenían estos comentarios de ‘México no está preparado para tener una mujer presidenta’. Y hoy la doctora Claudia Sheinbaum, no solo es referente en nuestro país, sino en el mundo”, señala.
Y puntualiza: “Siempre digo que es tiempo de mujeres, de todas, de la presidenta, de las gobernadoras, de las diputadas, de las senadoras, de las presidentas municipales, de las alcaldesas… Pero también de las vecinas. Es tiempo de que todas las mujeres tengamos voz, que podamos ver materializados los sueños de igualdad, de un acceso pleno a nuestros derechos”.
La alcaldesa recuerda el impulso a la agenda de las mujeres durante su paso por el Congreso de la Ciudad de México. “Dijimos: somos diputadas y además somos feministas, en toda la extensión de la palabra. No solo somos feministas por el 8M, que nos ponemos algo morado y salimos; no, somos feministas porque todos los días el feminismo es un estilo de vida, es una reivindicación”, destaca.
Ese mismo impulso la llevó a formar parte de un bloque de legisladoras que buscó hacer la diferencia: “Articulamos algo que era el Aquelarre de Donceles, tal cual. Entonces, decíamos ‘no es lo mismo que una diputada a veces presente una iniciativa en lo individual a que vaya arropada de otras diputadas’. Nos acompañamos, salió la Ley Vicaria, estuvimos trabajando varios temas sobre menstruación digna, muchos temas en la agenda que a veces no se enuncian, pero la menstruación era muy importante”.
Temas también sobre “poder alcanzar el derecho a decidir sobre nuestro cuerpo y la interrupción legal del embarazo, que al final del día es una decisión propia. Nosotras decíamos ‘se tiene que eliminar aborto del Código Penal’, apostar sobre esa agenda progresiva de derechos”, reflexiona Nancy Núñez.
Territorializar
La hoy alcaldesa abraza la convicción de que unidas las mujeres deben impulsar un objetivo común. “México vive una oportunidad histórica, es decir, nos tenemos que juntar, se terminó eso de ‘las mujeres juntas, ni difuntas’, o ‘no hay peor enemiga de una mujer que otra mujer’. Si las mujeres nos acompañamos, nos articulamos, podemos llegar a espacios de decisión. Abracemos todas la agenda”.
Hoy, desde el gobierno local, traslada esa agenda al territorio. “No podemos hacer el feminismo desde la élite, es importante el foro, es relevante la incidencia legislativa, pero es importante lo que pasa en las colonias. ¿Cómo ayudamos a las mujeres que siguen sin saber dónde denunciar la violencia?”
Nancy Núñez busca combatir la violencia cotidiana: “Ha aumentado el esquema de violencia comunitaria. No podemos tener miedo porque al salir de casa te chiflen, te acosen. Las mujeres tenemos que apostar al empoderamiento económico, una mujer no va a dejar su ciclo de violencia si no tiene un empoderamiento económico”, afirma.
Finalmente, hace un llamado para articular una ciudad feminista. “No podemos hacer política pública desde la élite. Creo que debemos ayudar a que más mujeres puedan acceder, convertirlo en una política pública sólida y territorializar los derechos”.
Aquí continuaremos dando espacio para poner en el centro la agenda de las mujeres.