En Ecatepec, el municipio más poblado del Estado de México con más de dos millones de habitantes, las mujeres viven desde hace una década bajo dos Alertas de Violencia de Género: la primera por feminicidio, emitida en 2015, y la segunda por desaparición de mujeres, decretada en 2019.
Estas declaratorias son un recordatorio de la urgencia, pero también del tamaño del desafío. De ello y de muchos otros temas conversé con la primera mujer que logró llegar a la presidencia municipal de Ecatepec, Azucena Cisneros.
“Hace una década todavía se pensaba que los municipios no estaban preparados para que una mujer los gobernara. En la elección para ser presidenta municipal todavía había voces internas que decían que las mujeres pierden en Ecatepec”, relata Cisneros.
Hoy su gestión se enfrenta a un reto mayor: construir políticas públicas que pasen de la retórica a la acción. Porque proteger la vida de las mujeres no es un acto simbólico, sino una responsabilidad permanente de todo gobierno.
Cisneros, quien lleva 34 años caminando en la política, ha enfrentado la violencia incluso en lo personal: “La última fue para poder ser candidata. Primero, como precandidata a la presidencia de Ecatepec, fue una campaña de difamación terrible”, recuerda. “Que yo era del crimen organizado, que yo era de las mafias; una campaña que llegó a nivel televisión, que llegó a la mañanera. Con muchísimo dinero de por medio y que finalmente te hace daño. Y a mi familia, nos hiere en el alma; en la parte humana, porque en política por supuesto que se puede ser decente, se puede tener una conducta intachable, se pueden tener principios. En la política hay límites; deben existir los límites; y el límite es la conciencia de uno, es la ética, porque no es el poder por el poder”, afirma.
La alcaldesa subraya que hoy la agenda de las mujeres es prioritaria. “Creo que es algo también inherente —o debe ser inherente— a una mujer: si nos toca ahora gobernar, tenemos que ayudar”.
Y la respuesta institucional comienza a tomar forma. “Hemos inaugurado el primer Centro de Atención a Víctimas, porque tenemos el Centro de Justicia al lado, ese lugar donde llegan y denuncian lesiones, violaciones, acosos, todo; y donde de repente había mujeres con ocho horas de espera. Entonces, ese Centro de Atención a Víctimas nos sirve para despresurizar, para poderles dar atención, para poder darles seguimiento, acompañamiento, abrazar a las mujeres y decirles ‘no están solas’; y darles seguimiento y además puntual solución a muchas de esas problemáticas”, puntualiza.
Red de apoyo
Se habilitó además un espacio para mujeres que necesitan un refugio inmediato. “Atendimos también un Centro de Pernocta, el cual habilitamos y lo volvimos completamente humano, lo abrimos y hoy las mujeres en Ecatepec que no sepan a dónde acudir y quieran salir de todos estos círculos de violencia, saben que el gobierno municipal tiene un espacio para ellas y sus hijos. Que van a estar seguras y sus hijos también, mientras nosotros conseguimos una red de apoyo y vemos qué podemos hacer con estos casos”, explica.
También se logró la creación de un C4 especializado, junto con la aplicación Red Violeta Ecatepec, que permite acompañamiento en tiempo real. “Abrimos un C4 también a favor de las mujeres; hay una App que bajas de forma muy sencilla en tu celular”, señala.
“Hemos recibido muchas, pero muchas llamadas de acompañamiento, donde las mujeres solo quieren que esté la policía, la monitora que es una policía, una sicóloga, un jurídico, que las acompañe”, añade.
Asimismo, la primera presidenta municipal en la historia de Ecatepec, integró una importante red de apoyo: “Convocamos a una red de diez mil mujeres que se dedican a hacer redes de apoyo en cada una de las colonias de Ecatepec, es decir, la agenda de las mujeres es una agenda prioritaria”.
Finalmente, envía un mensaje contundente: “Que sepan todas las mujeres de Ecatepec que no están solas, que tenemos todo para poderlas acompañar en estos procesos, que las vamos a ayudar en todo y por todo, para que salgan de cualquier situación de violencia que estén sufriendo”.