El Congreso de la Ciudad de México celebró una sesión solemne para conmemorar el 55 aniversario de los hechos ocurridos el 2 de octubre de 1968 contra estudiantes, en la que todos los grupos parlamentarios reconocieron que fueron la semilla de la libertad de la democracia y la transformación que vive actualmente el país y que habrá de continuar.
“Han pasado 55 años desde que el movimiento estudiantil de 1968 sentó profundamente las bases para alcanzar las libertades. Una lucha que pasó a la historia para despertar la conciencia sobre la importancia del respeto que debe existir entre las autoridades de gobierno y la población para evitar a toda costa la violencia, tal como lo reconocieron activistas del ‘68 el 26 de julio de 2018”, dijo el diputado priista y general Fausto Manuel Zamorano Esparza.
A la distancia hay que reconocer que este movimiento no se olvida, como tampoco los muchos hechos que se vivieron en varios países del mundo aquel año y menos a quienes perdieron la vida. Pero el tiempo ha dado la tranquilidad de que ese movimiento no fue en vano. Realmente fue el parteaguas para iniciar la lucha por la democracia y las libertades. ¿A poco no?
“Muchas fueron las razones que propiciaron el inicio del movimiento; no olvidarlas es honrar la memoria de todos los que luchaban por una causa. Por eso desde esta tribuna reconocemos que si los países saben aprender de sus desastres pueden convertirlos en acciones positivas que les permitan volver a florecer, aprendiendo que cada cicatriz en la historia es una huella imborrable que servirá para hacer una mejor nación”, reflexionó el general.
Ciertamente 1968 fue un año convulso en varios países del mundo. La guerra de Vietnam, los asesinatos de Martin Luther King y Robert Kennedy, la Primavera de Praga y la tragedia de Tlatelolco en México. Sin embargo, cuando hablamos del ‘68 se nos vienen a la cabeza tan solo nuestras revueltas estudiantiles: así de marcado lo llevamos en la historia. Y aunque es un hecho del que fuimos y somos parte todos los mexicanos, nos ayuda a honrar el recuerdo y nos mantiene alerta para evitar que se vuelva a repetir. ¿O acaso me equivoco?
“El respeto a la autonomía universitaria, el fortalecimiento a las instituciones educativas y la inminente necesidad de voltear a ver a los jóvenes son los retos actuales que tenemos como sociedad, sin menoscabar que son hechos cometidos por personas y no por instituciones. Por ello la insistencia de ser vigilantes del futuro de nuestras juventudes, pues en ellas está el futuro de la sociedad y de México”, precisó Zamorano.
“Hoy nos reunimos con corazones cargados de memoria y reflexión. Hoy recordamos a los valientes hombres y mujeres que perdieron la vida o fueron heridos en aquel trágico suceso. Recordamos su sacrificio en la búsqueda de un México más justo, por lo que es nuestro deber honrar su memoria aprendiendo de los errores del pasado. Debemos comprometernos a que nunca más se repitan”, resaltó.
En efecto, esos sucesos marcaron un antes y un después, puesto que marcaron un cambio, aunque falta mucho por hacer para consolidar un auténtico Estado social. ¡Desde luego!
El bolso de Laura…
Ahora déjeme contarle que el martes sorpresivamente el alcalde de Coyoacán, Giovani Gutiérrez, despidió y no de la mejor manera a su director general de Gobierno y Asuntos Jurídicos, Obdulio Ávila, y a todo el personal de este. Con decirle que los trabajadores denunciaron que con la fuerza pública fueron sacados de sus oficinas. Y a las pocas horas nombró como encargado al doctor Ricardo Pascoe. Se ha guardado mucho hermetismo sobre las razones para despedir a su mano derecha desde que inició su administración, pero se rumoran muchas cosas que afectarían la reelección del alcalde. ¿Será cierto?