Son nuestras elecciones las que muestran lo que somos, mucho más que nuestras habilidades.
J. K. Rowling
Creo que todos en algún momento hemos escuchado la frase “eres lo que comes”. Si bien considero que es una máxima que podría conllevar sentimientos negativos como culpa, angustia o miedo, acabo de leer sobre un estudio que quizá puede brindar un poco de luz a esta afirmación que me parece tan irritante y a la vez confusa.
El estudio, publicado recientemente en el diario Appetite, brinda una explicación sobre el vínculo que existe entre los rasgos de la personalidad y la elección de dietas que elegimos. Este descubre conexiones curiosas que podrían darnos una explicación para entender por qué algunas personas siguen dietas específicas.
Los investigadores se dedicaron a examinar los hábitos alimenticios de individuos, categorizándolos en tres grupos: aquellos que consumen productos animales (omnívoros); aquellos que evitan la carne, pero sí consumen otros productos animales (vegetarianos); y los que se abstienen por completo de comer todos los productos animales (veganos).
Otras investigaciones habían demostrado que la prevalencia de las dietas vegetarianas y veganas ha ido en aumento en las sociedades occidentales. Este aumento de popularidad ha despertado la curiosidad sobre qué motiva a las personas a adoptar estas preferencias en los hábitos alimenticios.
Dado que se sabe que los rasgos de personalidad influyen en diversos aspectos de la vida, los expertos se propusieron investigar si determinados rasgos de personalidad estaban asociados a distintas preferencias alimenticias.
Punto de inicio
Para realizar el estudio Christopher J. Hopwood, profesor de Sicología de la Personalidad en la Universidad de Zurich, y sus colegas utilizaron una técnica de metaanálisis que combina y analiza data de múltiples estudios para llegar a mejores conclusiones. Estos estudios examinaron rasgos de la personalidad como apertura, amabilidad, neuroticismo, extraversión y conciencia en relación con los hábitos alimenticios.
La apertura refleja la curiosidad, la creatividad y la disposición a aceptar nuevas experiencias. La conciencia implica rasgos como la organización, la fiabilidad y la autodisciplina. La extraversión está relacionada con la sociabilidad, la asertividad y la preferencia por la interacción social. La amabilidad engloba atributos como la cooperación y la empatía. El neuroticismo está relacionado con la estabilidad emocional, la ansiedad y la susceptibilidad a las emociones negativas.
Luego de analizar nueve estudios que involucraron a casi 70 mil individuos de varios países, como Alemania, Estados Unidos y Nueva Zelanda, entre otros, los investigadores descubrieron que los individuos que se identifican como vegetarianos o veganos tenían una mayor puntuación en los rasgos de la personalidad de apertura y amabilidad en comparación con los omnívoros. Entre vegetarianos y veganos la única diferencia significativa en los rasgos de personalidad estaba relacionada con la apertura. Los veganos salieron más altos que los vegetarianos.
Curiosamente, el estudio no encontró asociaciones consistentes entre otros rasgos de la personalidad (neuroticismo, extraversión y conciencia) y las elecciones dietéticas, lo que sugiere que la apertura y la amabilidad fueron los rasgos de personalidad clave vinculados a las dietas vegetariana y vegana.
Si bien este estudio es limitado, ya que la data únicamente incluye a individuos occidentales, es un punto de inicio para seguir explorando qué tanto tiene que ver nuestra personalidad con nuestros hábitos alimenticios.
Y tú ¿qué comes y qué no comes?