De acuerdo con la más reciente Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los Hogares (ENDIREH), a 2% de las mujeres mayores de 15 años alguna vez en su vida laboral le han pedido una prueba de embarazo como requisito para trabajar.
La ENDIREH 2021 también destaca que a más de 740 mil 800 mujeres le pidieron prueba de embarazo para continuar en su trabajo o renovarle el contrato; a casi 272 mil las despidieron por embarazarse; a cerca de 219 mil ya no les renovaron el contrato por ese mismo motivo; y a 144 mil 947 les bajaron el salario por ejercer su derecho a gestar.
Tania Sánchez, abogada, directora del área de Capacitación de la Confederación Auténtica de Trabajadores de la República Mexicana (CAT), dice al respecto que estar embarazada o planear un embarazo es un derecho que las mujeres tenemos.
—¿Qué derechos deben tener más presentes las mujeres que son madres trabajadoras?
—Atrévanse, chicas, no tengan miedo a decir en sus trabajos que están embarazadas o que lo están intentando, porque es un derecho. Anteriormente una mujer que llegaba embarazada a un trabajo era discriminada, pero hoy en día se ve menos esa parte. Me parece que las empresas por obligación se han hecho conscientes paulatinamente de ese derecho.
Añade que “una vez que estemos embarazadas, nuestra obligación es avisar a nuestro patrón; esto es importante, ya que en ocasiones las situaciones laborales conllevan demasiado estrés. Para eso está la NOM-035 donde, por ejemplo, si tenemos embarazo de alto riesgo nuestro empleador debe estar enterado; también porque se le debe dar aviso al Seguro Social. Otra condición es que de ser necesario se debe mover a la trabajadora a otra área cuando se requiera; por ejemplo, si labora en el área de rayos X”.
Igualitarios
Además, agrega, durante el periodo pre y posnatal todos los derechos de la trabajadora deberán seguir vigentes, así como todas las prestaciones. Y “una vez que regresamos a nuestro empleo, también tenemos derecho a un periodo de lactancia; ese periodo se utiliza para poder alimentar a nuestro bebé o para extraerse leche y hacer el almacenamiento. También se puede llegar a un acuerdo con el empleador (que es lo más común) para salir antes y tener ese periodo de lactancia con el bebé en el hogar. De no respetar este tiempo de lactancia, las empresas pueden hacerse acreedoras a una inspección por las condiciones de trabajo”.
—¿Por qué debemos estar informadas acerca de nuestros derechos laborales?
—Es importante decir que los derechos laborales son igualitarios; saber que los aguinaldos, las vacaciones, la prima vacacional, primas dominicales, bonos, vales, descuentos, comisiones, fondo de ahorro, participación de las utilidades… todas ellas son prestaciones que se encuentran establecidas en la Ley Federal del Trabajo y en la Constitución.
En este sentido, indica Sánchez, “también es importante saber cómo se calculan cada una de estas prestaciones y descuentos que también nos toca asumir como trabajadoras. La recomendación es que busquen alguna asesoría gratuita con las autoridades laborales o si tienen sindicato acérquense a ellos para aclarar todas sus dudas, ya que final del día los especialistas nos van a poder dar el status de nuestra situación tal como lo hace un médico con nuestra salud: nos pueden decir qué nos falta o en qué posición nos encontramos respecto de nuestros derechos laborales”.