HUGO, MÁRQUEZ Y GUARDADO… NADA MÁS

“Un jugador de primera categoría”.

Cristopher Rivera
Columnas
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En general del futbol mexicano no se han desprendido tantos ídolos. Y no porque no predomine el talento, sino porque lamentablemente muchos de esos genios del balón no quisieron acompañar sus virtudes con esa dosis de disciplina que se requiere. Además de que sus aspiraciones son o fueron bajas.

Hasta ahora solo son dos los más grandes ídolos del futbol mexicano. Se trata de Hugo Sánchez y Rafael Márquez… ¡Pero no! ¡Permítame tantito! Me voy a atrever a completar la tercia, a añadir uno más. Y no, no es ni de broma Cuauhtémoc Blanco, sino Andrés Guardado.

Sí, Guardado, ese que quizá no se ha caracterizado por ser el jugador más exquisito con el balón o el más desequilibrante, como al inicio de su carrera, pero cuenta con lo que muchos no han tenido a pesar de ser unos cracks: mentalidad ganadora y disciplina en todo sentido. Por eso casi toda su carrera futbolística la ha hecho en Europa.

Todavía recuerdo aquellos años en los que todo mundo hablaba de un Carlos Vela que al final jamás ha tenido la mentalidad necesaria para mantenerse siempre en el mejor futbol del planeta. O de un Giovani dos Santos, que nunca pudo consolidarse ni en un lugar ni en otro. Todo mundo hablaba de estos jugadores, y otros, pero poco de un chico llamado Andrés Guardado.

Y así, pian-pianito, calladito, este menudito jugador, con una zurda educada, líder y tácticamente ordenadísimo, ha acumulado 17 años en el futbol de Europa, que se dicen fácil, pero no lo son. Ya quisieran muchos jugadores presumir de una carrera como la que ha construido este hombre nacido profesionalmente en los rojinegros del Atlas.

También parece muy sencillo jugar cinco Copas del Mundo, pero no lo es. Guardado literalmente puede presumir que en los cinco mundiales que estuvo participó y sumó minutos. No fue el típico veterano al que llamaron para registrarlo, sentarlo en la banca y hacerlo parte de una estadística histórica.

Sus números como jugador a nivel de clubes y selección nacional son brutales; son de un jugador de primera categoría, dignos de guardar para siempre.

Retiro

Ya que estamos en temas de Copas del Mundo, claro que resulta una pena que Guardado se retire de la Selección Mexicana, decisión que es sensata, puesto que cada vez está más cerca de ponerle punto final a su brillante etapa como jugador. Pero es una pena porque no hay más “Guardados”, ni se alcanzan a ver en el grueso de las nuevas generaciones jugadores con la capacidad de trascender a los niveles del hoy elemento del Real Betis Balompié.

Ojalá los jugadores que están a punto del debut profesional y aquellos que comienzan con sus carreras puedan echarle un vistazo a la trayectoria de Guardado y si es posible sostener una platicadita con él. Créanme: de mucho les servirá. Es el modelo perfecto de cómo un futbolista debe cuidar su profesión para ser pleno y exitoso dentro y fuera de las canchas.

Por eso, reitero, está ahí atrás de Hugo Sánchez y Rafael Márquez como los más grandes de la historia.