LA ISLA DE LAS MUÑECAS

Sergio Pérezgrovas
Columnas
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Cuando no haya más lugar en el infierno
los muertos caminarán por la tierra.
Dicho popular

Julián Santana Barrera era el nombre de un vigilante en los canales de Xochimilco en la Ciudad de México. Un día en la década de 1950 descubrió el cuerpo de una pequeña niña que al parecer se ahogó porque los lirios no le permitieron salir del agua. Él trató de salvarla pero no pudo. Dicen que la infanta fue poseída por una muñeca.

Ahí fue cuando Julián comenzó a poner figuras en la isleta cercana para, según él, ahuyentar a los espíritus, ya que afirmaba que las muñecas estaban poseídas por niños pequeños. Don Julián poco a poco fue perdiendo la razón hasta convertirse en un anacoreta (qué tal con mi palabra dominguera) y fue coleccionando más y más muñecas por todo el terreno.

Construyó una choza y la llenó con cabezas y cuerpos de plástico que generalmente encontraba en la basura, aunque también los visitantes le regalaban muñecas. Don Julián aseguraba que servían como amuleto para ahuyentar a los espíritus y ayudaban a mejorar los cultivos de la zona.

La isla cuenta actualmente con unas dos mil figuras. Con el tiempo él se quedó a vivir ahí. La leyenda cuenta que se volvió loco por no poder salvar a la niña. Los lugareños afirman que tal vez él fue poseído por algún alma en pena debido a que cambió radicalmente su forma de vivir. Parte del misterio es que la gente asegura que por las noches las muñecas cobran vida.

Después de que don Julián murió en situaciones poco claras, su cuerpo fue encontrado, según cuentan, en la misma posición en la que él encontró a la niña.

Lo cierto es que hoy por hoy la isla sigue siendo visitada por muchos turistas que acuden a Xochimilco. Es uno de sus atractivos principales. Te subes a una trajinera y comienza el recorrido, que tarda alrededor de cinco horas con un costo promedio de 50 pesos, más lo que comas y tomes dentro de la embarcación. Sin duda es un lugar enigmático y lleno de misterio para los amantes del terror.

Se rumora que la isla ha cobrado la vida de la niña, de Julián y de una turista que al llegar a la chinampa cayó al agua y se ahogó tras enredarse con los lirios.

Actualmente un sobrino nieto de don Julián es quien cuida de la isla.

Lorenza

Tristán había decidido llevar de paseo a su sobrina Lorenza. Era un día soleado, así que tomó su carro y se encaminó por el Periférico hacia el sur. Su rumbo era Xochimilco.

La chamaca no conocía, así que a Tris le pareció buena idea llevarla a visitar los canales. Entró en una de las nueve embarcaciones, contrató una trajinera y le platicó a Lorenza que los canales solían ocupar gran parte de lo que ahora conocemos como CDMX.

Lore había desarrollado un gusto especial por las cosas paranormales. Habían visto El exorcista una tarde y la niña reía a carcajadas (claro que en la noche le pidió a su tío dormir con él).

Tris la llevó para ver la isla de las muñecas mientras le platicaba la leyenda. Ella estaba fascinada con la historia cuando, de repente, Tris vio un cuerpo en el agua, ahogado y enredado en los lirios, que se han convertido en una verdadera plaga para el lugar. Llamó por su celular y arrastró el cuerpo junto con un lugareño para dejarlo en parte de la tierra.

Lorenza estaba más que encantada. Era la primera vez que veía un cuerpo muerto de a deveras.

—Oye, Tris, este es el mejor paseo que hemos realizado.

Tris tuvo que aguantarse la carcajada. Se contuvo hasta que apareció el MP. El policía se dio cuenta rápido de que era un asesinato por las marcas de golpes que tenía en la cara el occiso, pero no dijo nada para no alertar a la niña. Regresaron a su casa.

Tris, a la mañana siguiente, volvió con el remero, quien le contó que el muerto quería quedarse con parte de la tierra de cultivo, así que algunos vecinos lo aventaron al agua después de propinarle una golpiza que lo dejó inconsciente. Regresó en la noche y dio con el líder, que confesó el asesinato a punta de pistola en los tanates, sin que nadie lo viera. A la mañana siguiente, en los titulares de los periódicos digitales apareció la noticia, con el encabezado que decía: “Líder de los chinamperos muere ahogado y enredado en los lirios junto a la isla de las muñecas”.