El deporte mexicano vivió en 2025 uno de esos momentos que marcan época por la irrupción definitiva de una figura capaz de competir —y brillar— en la élite absoluta del deporte mundial: Isaac del Toro no solo hizo historia al conseguir un extraordinario segundo lugar en el Giro de Italia, sino que a partir de ahí confirmó con resultados consistentes que México ya tiene a uno de los mejores ciclistas del planeta.
Lo conseguido por Del Toro no es un destello aislado ni una sorpresa pasajera. Es el resultado de talento, disciplina y una madurez competitiva poco común para su edad.
Competir de tú a tú con las grandes figuras del ciclismo mundial, sostener el ritmo durante tres semanas en una de las pruebas más duras del calendario internacional y salir fortalecido de ese reto lo colocan en una categoría reservada solo para los grandes.
Con todo respeto —y con plena admiración— para deportistas como Osmar Olvera, cuya excelencia en los clavados ha dado prestigio internacional a México, y para otras figuras destacadas del deporte nacional, es necesario decirlo con claridad: Isaac del Toro es el mejor deportista mexicano de 2025.
No se trata de una comparación injusta sino del reconocimiento al impacto global, la exigencia competitiva y la dimensión histórica de sus logros.
Para 2026 …
Mirando hacia 2026, el deporte mexicano tiene motivos de sobra para mantener la expectativa alta.
El propio Isaac del Toro será una de las figuras centrales del año, ahora con el reto mayúsculo de competir y debatir protagonismo en el Tour de France, la carrera más emblemática del ciclismo mundial.
A ello se suma el regreso de Sergio Checo Pérez a la Fórmula 1 (F1), ahora con el ambicioso proyecto de Cadillac, un acontecimiento que sin duda captará la atención del deporte motor internacional.
En los clavados, Osmar Olvera continuará siendo un referente obligado en los campeonatos mundiales, donde su constancia y nivel lo mantienen en la élite.
Paralelamente, será imposible no seguir de cerca el camino de la Selección Mexicana de Futbol, que afrontará un desafío histórico como una de las anfitrionas de la Copa del Mundo de Futbol 2026. Más allá de resultados, el proceso y las decisiones que se tomen rumbo a ese torneo marcarán una generación.
Desde Vértigo cerramos este 2025 reconociendo el mérito, el esfuerzo y la grandeza de nuestros deportistas. Deseamos a nuestras lectoras y lectores que 2026 sea un año lleno de salud, alegrías y nuevas razones para creer en el deporte mexicano, ese que —cuando alcanza su mejor versión— también es reflejo de lo mejor que podemos ser como país.

