Por fin llega a streaming la duodécima película de Christopher Nolan, la multipremiada Oppenheimer, un impresionante biopic sobre J. Robert Oppenheimer, la controvertida figura en la historia de Estados Unidos.
Como un pintor de emociones en la pantalla, Nolan nos sumerge en la vida de este físico teórico cuyo legado oscila entre la gloria de liderar el Proyecto Manhattan y la oscuridad de ser tachado como el “padre de la bomba atómica”.
Pero el genio detrás de la película no termina con Oppenheimer: Cillian Murphy, el inconfundible y talentoso actor que ha sido parte fundamental de la filmografía del realizador, personifica con toda profundidad al enigmático protagonista. Su gran parecido y su habilidad para reflejar la melancolía de Oppenheimer cautiva a los espectadores desde la primera imagen.
Nolan, un conocido perfeccionista cinematográfico, pinta un lienzo visualmente impresionante y nos sumerge en un espectáculo sensorial que desafía los límites de lo convencional. La prueba de la bomba Trinity cobra vida con explosiones reales y efectos prácticos que nos transportan a un momento crítico en la historia de la humanidad. Nada de CGI (imágenes generadas por computadora) aquí, solo la maestría del director en su forma más pura.
El reparto estelar añade un toque de elegancia a la narrativa. Gary Oldman, Matthew Modine, Robert Downey Jr, Matt Damon y Emily Blunt deslumbran con interpretaciones magistrales que complementan la esencia del film. Florence Pugh, en su papel de Jean Tatlock, amante de Oppenheimer, agrega una profundidad emocional con escenas amorosas, realistas y conmovedoras, que le dan un toque humano a esta compleja figura histórica.
Introspección
El filme no es una producción convencional sino un viaje intrincado y apasionante a la mente y el alma de un hombre cuyas decisiones cambiaron el curso de la historia. Nolan, siempre ávido de explorar temas profundos, presenta un estudio de personajes que nos invita a reflexionar sobre la naturaleza humana y el dilema moral de la energía nuclear.
Aunque la duración de tres horas puede parecer un desafío para algunos espectadores, Oppenheimer justifica cada minuto invertido. La película ofrece una narrativa rica y compleja, que explora la sique de su protagonista con una profundidad cautivadora. No es solo una historia sobre la creación de una bomba, sino una introspección en los matices de la mente humana y cómo nuestras decisiones pueden tener consecuencias impredecibles.
Sin duda, Oppenheimer es un gran trabajo cinematográfico, un retrato cautivador de una figura histórica fascinante y un espectacular ejemplo del talento de Christopher Nolan. Con una narrativa magistral, interpretaciones impecables y un despliegue visual que deslumbra, el filme se destaca como una película que trasciende el tiempo y deja una impresión duradera en el espectador.
Para quienes no la pudieron ver en cine, ahora esta inolvidable experiencia cinematográfica es imperdible en streaming. Disponible en Max.