En 2019 se modificó la Ley Federal del Trabajo en su capítulo XIII, Personas Trabajadoras del Hogar, donde se establecen los derechos y obligaciones de las personas empleadoras para garantizarles un trabajo digno, incluyendo un contrato laboral estable y prestaciones de ley como en cualquier trabajo.
En entrevista, Teresa Huerta, politóloga especialista en derechos laborales y cofundadora de Afíliame, platica sobre la importancia de garantizar seguridad social a las mujeres trabajadoras independientes.
—¿Cuál es la situación de las mujeres trabajadoras del hogar?
—Actualmente hay alrededor de 2.4 millones de trabajadoras del hogar y a tres años de estar funcionando el programa piloto para ellas solamente 1.5% ha sido incorporado al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS); es decir, más o menos 30 mil trabajadoras.
—¿Por qué no ha tenido éxito la reincorporación a la formalidad?
—Hay varias razones, pero creo que el problema más importante es la falta de información. Las trabajadoras del hogar no saben en qué les beneficia tener el seguro que otorga el IMSS. Muchas prefieren que ese dinero se sume a su salario. Pero lo que desconocen es que esa adhesión a la formalidad significa que sus padres, sus hijos y hasta su cónyuge van a tener seguro, que ellas van a tener atención en cualquier emergencia médica, van a tener acceso a guarderías, incapacidades pagadas, hasta servicios de velatorios.
Otro aspecto relevante, indica Huerta, “es que depende de las edades, pero se gasta más o menos de 15 a 20% en servicios de salud como medicinas, consultas, sobre todo en personas mayores de 50 años. El punto aquí es que si tú eres trabajadora del hogar y tienes más de 50 años claramente te conviene, porque además muchas trabajadoras de ese rango de edad, regularmente trabajaron durante su juventud en fábricas y todavía les aplica la Ley 73, que les puede otorgar una pensión. Esa ley marca que necesitas 500 semanas cotizadas; entonces, si esas trabajadoras tienen dos o tres años cotizados y actualmente pueden incorporarse al IMSS están a muy buen momento de tener una pensión digna y aparte se quedan con seguro médico de por vida”.
Sencillo
—¿Cuál es la recomendación para las trabajadoras del hogar?
—La ley obliga al empleador a asegurar a su trabajadora solo por el día en que trabaja con él. Lo que se recomienda es hacer un chat; por ejemplo, un grupo en WhatsApp, con todos tus patrones y poderles decir: “Me interesa poder tener el Seguro Social, cada uno de ustedes tendría que aportar tanto”, y así lograr una incorporación más en forma. No obstante, cuando la trabajadora del hogar se da cuenta de que en general vale la pena organizarse con sus empleadores y generar una relación laboral más armónica, en el sentido de que le conviene quedarse con el trabajo porque solamente 1% de los empleadores ofrecen IMSS a sus trabajadoras del hogar, entonces cuida su chamba. Por el otro lado, a los patrones les conviene en el sentido de que tienen una trabajadora leal, que regresa siempre después de sus vacaciones.
—En este sentido, ¿cómo les ayuda Afíliame?
—Es un servicio que ayuda a cualquier empleador de trabajadoras del hogar a hacer los trámites. Realmente si bien se les asignó la obligación laboral de afiliarlas al IMSS, realmente la mayoría de las amas de casa, que son las que realmente tienen el vínculo laboral, no tienen el conocimiento de hacer los trámites para que tengan Seguro Social. Sean amas de casa o no, nosotros les realizamos todos los trámites. Apoyamos de forma sencilla y explicativa a las dos partes.