LACOSTE

“Trabajo duro, entrenamiento y dedicación”.

Sergio Pérezgrovas
Columnas
Historia de Lacoste 2022

Es 1923. En Boston hay un joven llamado René Lacoste. Tiene 19 años y le encantan los desafíos. El capitán de su equipo le hace una apuesta y le promete una hermosa maleta de piel de cocodrilo si logra ganar un partido de tenis. René pierde el juego, pero un periodista gringo lo apoda El Cocodrilo por su tenacidad en la cancha.
El cocodrilo toma la forma en 1927 por el trazo del estilista Robert George, quien es un precursor de la “customización”. René le pide que borde este diseño en sus blazers. Años más tarde nace la camisa polo. El pinche cocodrilo sobre el corazón se convierte en Lacoste y es la primera marca en poner el logo en una prenda.
René, a lo largo de su carrera, además de ser un extraordinario tenista fue un innovador del deporte. Fue el primero en tallar el mango de su raqueta y cubrirlo con cinta quirúrgica para poder sujetarlo mejor. Entre sus inventos más famosos está la máquina que avienta pelotas para que el tenista pueda entrenar solo o una raqueta de metal ligera y fácil de manejar. Todas sus invenciones mejoraron su juego y el de las siguientes generaciones.
Pero ¿quién era René Lacoste? Nació en París el 2 de julio de 1904 y murió en San Juan de Luz en 1996. Fue ganador de siete Grand Slam. Formó parte de la más conocida generación de tenistas franceses de los veinte con los llamados Mosqueteros.

Él no era, al principio, el gran jugador ni tenía un talento natural. Es más, su vida parecía estar dirigida al mundo de la educación o al estudio del tenis. Su fama la alcanzó por un trabajo duro, con rigurosidad de entrenamiento y dedicación.

Los otros Mosqueteros eran autodidactas, pero René trabajó al principio con un entrenador de renombre; además lo complementaba con entrenamientos de gimnasia y acondicionamiento físico. Fue un gran apasionado que lo llevó a ser considerado como el número uno en su época.
Después de su retiro se convirtió en capitán del equipo francés de Copa Davis y también fue presidente de la federación francesa de tenis hasta 1942.
En 1933 fundó su compañía Lacoste, cuyo logo es mundialmente conocido como el cocodrilo de su apodo. En 1963 diseñó una raqueta de acero y con ella se conquistaron 46 títulos de Grand Slam. Algunos de los tenistas que usaron su raqueta son Billie Jean King y Jimmy Connors, entre muchos otros.

Murió en 1996, a los 92 años, en la ciudad costera de San Juan de Luz. Se dice que para su funeral lo vistieron con una de sus icónicas playeras polo.
El tenista
Allá por la colonia Florida hay un club de tenis muy famoso a donde va pura gente a quien le gusta el deporte blanco. En una de las canchas encontraron muerta a una de sus jugadoras más famosas, de nombre Andrea Dada. Ella tenía una raqueta de acero incrustada por la parte trasera del cráneo. Alguien la mató y nadie vio nada, así que llamaron al buen Tris para resolver el misterio.
La jugadora había llegado muy temprano a pelotear y, según el registro, tenía partido con una de sus más grandes contrincantes, pero la susodicha no llegó. En el registro apareció el nombre de Juan Carlos V. Tris encontró la dirección y fue a buscarlo a su casa. Abrió la puerta sin preguntar. En la entrada había una maleta Lacoste con una raqueta igual a la que usó el asesino. Al final del pasillo, muy quitado de la pena, junto a una mujer, se encontraba el sujeto.

Tris, con la raqueta en la mano derecha, lo sorprendió atestándole un raquetazo en la espalda. En la mano izquierda traía su revolver, así que el tipejo confesó el crimen. Tris lo esposó y se lo llevó a la comisaría. En el camino, al preguntarle el motivo de su crimen, Juan Carlos contestó:
—Siempre se burlaba de mi mujer, así que decidí que ya no más. Por eso la maté.

Tris no lo mató justo porque ahí se encontraba la causante de la muerte de Andrea.
En el reporte que Clau le ayudó a llenar a Tris decía: “Break de cabeza por una raqueta. Muerte súbita de la occisa”.