“Puedo decir con convencimiento absoluto que aquel que mira un espectáculo de flamenco en vivo queda tocado, siempre para bien y siempre con el buen recuerdo”, afirma María Juncal, una de las mayores exponentes de baile flamenco de este siglo.
Nacida en Las Palmas de Gran Canaria, proviene de una de las familias más reconocidas en la historia de este arte, los Borull, por lo que para elegir la profesión “no tuve que pensarlo mucho: fue una cuestión más instintiva y de sensibilidad, puesto que mi juego favorito siempre fue bailar”.
Junto con su tía abuela Trini Borrull, inició sus estudios de danza española en las islas para más tarde continuar su formación especializada en el prestigioso Centro de Arte Flamenco Amor de Dios, en Madrid.
Juncal fue alumna de los maestros Ciro, Merche Esmeralda, Guito, Manolete, La Tati y Cristóbal Reyes, entre otros.
“De mi lado materno todos se dedicaron a este arte. Mis ancestros están en las páginas de los libros de historia del flamenco. Por parte de mi padre, la verdad es que eran grandes disfrutadores de este arte también”, dice la bailaora.
Respecto de si existen diferentes tipos de flamenco, la maestra es clara: “El flamenco es único e indivisible, por lo que no hay distintos tipos de flamenco. Existen, sí, elementos y estilos: el flamenco te da esa libertad”.
Corazón
A lo largo de su carrera Juncal ha ganado distintos premios y reconocimientos, incluyendo el Nacional de Danza de Córdoba Antonio Gades; el primer premio Danza Flamenca del Cante de las Minas Trofeo Desplante; el primer premio de Coreografía del Teatro Albéniz; el Excelencias del Arte; mención de honor del Gran Teatro de La Habana; el Best of the best por su espectáculo El encierro de Anne Frank; y fue nominada a los Premios MAX 2020 como Mejor Intérprete de Danza.
La maestra ha pisado distintos escenarios del mundo con diferentes espectáculos: Destemplao, Quimera, Flamenco al natural, Tercera llamada, El encierro de Anne Frank, Fantasía flamenca, Emotions y La vida es un romance, entre otros.
En la actualidad colabora activamente con el proyecto comunitario A compás flamenco, en Cuba, siendo reconocida con el premio Excelencias del Arte por el apoyo al desarrollo de la cultura en los barrios desfavorecidos de La Habana. Asimismo, colabora con la Fundación CONFE para personas discapacitadas, además de participar en la coreografía para el equipo nacional de Gimnasia Rítmica de España.
Juncal imparte cursos de flamenco internacionalmente, así como en el Centro de Arte Flamenco Amor De Dios.
En 2020 estrenó el espectáculo Bailaoras en el Teatro de Bellas Artes de Madrid, con gran éxito de crítica y público.
Recientemente, con su obra La vida es un romance, llevó a cabo una temporada de siete semanas en el conocido Teatro Cofidis en la capital de España.
Juncal señala que si bien las nuevas generaciones se hallan más conectadas con lo digital, “cuando por cualquier circunstancia se reencuentran con el flamenco le vuelven a abrir las puertas”.
A pesar de que la información hoy en día está más cerca de las personas, hay cuestiones que “solo pueden apreciarse en vivo, como la danza, que es algo que se ve, una expresión que dibuja y pone color al sonido”, puntualiza María Juncal.
Y añade que “la lucha por mantener vivas las tradiciones del mundo no es algo nuevo: el arte siempre se adapta a los cambios y a las generaciones que vienen”.
Tablao
Juncal, que ha paseado y pasea su flamenco por los festivales y teatros del mundo, vuelve a nuestro país como parte fundamental de sus proyectos artísticos: los espectáculos de la bailaora evolucionan y ahora vive una etapa como emprendedora al abrir en la Ciudad de México el Juncal Tablao Flamenco, un epicentro de las artes escénicas donde se dan cita grandes bailaores como Marién Luévano, Armando Tovar, Ana Pruneda, Paula Rodríguez y Karime Amaya —descendiente de la gran bailaora española Carmen Amaya.
“Este lugar, en Álvaro Obregón 293, es un sueño hecho realidad y quería que sucediera en México. Es una recompensa. Un sueño que dará vida a muchos más. Para mí, el flamenco es ilusión, pasión, voluntad, entrega y emoción. Un arte que emociona”, afirma María Juncal.
Juncal Tablao Flamenco “busca mantener el arte en lo más alto, con los máximos exponentes del flamenco. Un lugar para disfrutar del arte, que por suerte todavía está hecho de particularidades”.