ÓPERA: UN ARTE MULTIDISCIPLINARIO

“Es una de las artes escénicas más completas”.

Alejandra Moncada
Cultura
ÓPERA

El 28 de abril se llevó a cabo una función especial de ópera para las infancias: la Orquesta de Cámara de Bellas Artes (OCBA), del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL), presentó Bastián y Bastiana, una ópera para niños en un acto con música de Wolfgang Amadeus Mozart y libreto de Friedrich Wilhelm Weiskern, Johann H. F. Müller y Johann Andreas Schachtner.

La dirección de orquesta estuvo a cargo de Luis Manuel Sánchez, mientras que la dirección escénica fue encabezada por César Piña. Ambos cuentan con una larga trayectoria artística.

Sánchez, por ejemplo, ha dirigido orquestas, bandas y coros tanto nacionales como internacionales, entre las que se encuentran la Orquesta Filarmónica de la Universidad Nacional Autónoma de México (OFUNAM), la Orquesta Sinfónica del Estado de México y el Coro del Teatro de Bellas Artes, entre otros.

Por su lado, Piña ha colaborado con numerosas orquestas mexicanas para dirigir un variado repertorio de más de 30 espectáculos, entre los que destacan La flauta mágica, El barbero de Sevilla, La hija del regimiento, Attila, La Traviata, Aida, Tosca, La bohemia, Payasos, Carmen, Sansón y Dalila y Alicia.

La ópera es una forma de arte que combina música, teatro, vestuario elaborado y escenografía para contar historias emocionantes.

Este arte multidisciplinario se estableció en nuestra nación durante el siglo XIX con la construcción del Teatro Nacional de México en 1844, que más tarde se convertiría en el Palacio de Bellas Artes. Dicho recinto se volvió el epicentro de la ópera en el país y ha sido testigo de muchas producciones destacadas a lo largo de los años.

La Ópera de Bellas Artes, inaugurada en 1934, se consolidó como uno de los principales escenarios para la ópera en México, presentando producciones nacionales e internacionales y atrayendo a destacados artistas de todo el mundo, con lo cual este género artístico continuó floreciendo con la creación de compañías y festivales de ópera en todo el país.

En las últimas décadas la ópera en México ha experimentado un renovado interés y vitalidad con un aumento en la cantidad de producciones, la formación de nuevas compañías y la participación del público.

Además de la Ópera de Bellas Artes, otras ciudades importantes como Guadalajara, Monterrey y Puebla han emergido como centros de ópera, con la creación de sus propias compañías y festivales.

Labor artística

En entrevista con Vértigo el director de orquesta Luis Manuel Sánchez y el director escénico César Piña comparten su experiencia en la ópera especialmente dirigida al público infantil.

—¿Cuáles son los desafíos que encuentra para dirigir una ópera a diferencia de otras formas teatrales, maestro Sánchez?

—La ópera es definitivamente una de las artes escénicas más completas porque tenemos música, canto, lo que sucede en la escenografía, a veces hay ballet, vestuario, iluminación, un sinfín de cosas. La ópera te pide que estés al pendiente de muchos aspectos, no solamente el orquestal, sino lo que está pasando en escena, la respiración con los cantantes, a veces esperar un efecto visual ya sea por la iluminación o por la escenografía o por la escena… Entonces, hay mucho en juego en una ópera.

En esta ocasión, dice, “la oportunidad de llevar esta ópera que Mozart escribe a sus doce años y ofrecerla a los niños es maravilloso; poder adentrarlos a la música de concierto, a la ópera con este título es muy acertado. Además, con la puesta en escena y dirección escénica de César Piña, quien logra hacerlo de una manera muy ágil, muy dinámica, muy divertida”.

—¿Cómo puede ser relevante la ópera para la sociedad moderna?

—El arte está presente desde la antigüedad. Pensemos en Grecia. La música y las representaciones escénicas eran un espacio de desahogo del público, de los que presenciaban estas representaciones. Eso no ha cambiado. Las emociones del ser humano son las mismas a pesar de los cientos, miles de años que han pasado; las representaciones artísticas, escénicas, ayudan a dispersar, y por qué no, a enaltecer y a relajar el espíritu humano. Pero sí: la intención es crear nuevos públicos, acercarlos a estas expresiones artísticas musicales que de verdad creemos que ayudan a que el ser humano se renueve. Acercar al público infantil, principalmente, a la ópera y a la música de concierto es una necesaria labor que tenemos nosotros como OCBA.

—Maestro Piña, ¿cuál es su enfoque en la dirección de escena y cómo ha cambiado a lo largo de su carrera?

—Debuté hace 20 años en el Palacio de Bellas Artes, el 15 de febrero de 2004 fue la primera ópera que dirigí. Eso sirvió para traer todo un bagaje y una experiencia. Como decimos, “se aprende en las tablas”. Inicié así en la práctica y he ido evolucionando, porque he ido tratando de adaptarme sobre todo para los niños, a estas nuevas cosas de la tecnología: los juegos de video, las películas, la música que ahora escuchan para que también regresen a la ópera. ¿Cómo he hecho esto? Basándome en lo visual, para que visualmente sientan esa misma atracción que tienen con los nuevos movimientos artísticos que les son más cercanos.

—¿Cuáles son los desafíos que encuentra al montar una obra clásica en la actualidad?

—Con la obra de Bastián y Bastiana justamente ese ha sido el gran reto, porque Mozart escribió esto en 1768, hace 300 años. Entonces, la música está respetadísima, pero el tratamiento y la dramaturgia de la ópera es la que está actualizada. Mostrarla desde la reflexión y lo visual: usar los colores, la manera en la que el niño voltee al escenario y no se aburra con algo ciertamente muy lejano pero que se vuelve actual. Trato de que las puestas tengan esto sin faltar ni violar la música, porque es la esencia para poderlos también acercar a que hay otras maneras de divertirse y de que una ópera puede ser muy divertida. Es diferente a lo que están habituados pero que se complementa muy bien.

De este modo, ambos artistas se comprometen con el proyecto para acercar a la infancia a este arte multidisciplinario que es la ópera.