En el marco de la reunión anual de dueños de equipos de la NFL, el comisionado Roger Goodell dejó claro que no está en sus planes modificar la participación de Bad Bunny como artista principal del espectáculo de medio tiempo del próximo Super Bowl.
Goodell sostuvo que la liga está acostumbrada a las críticas por sus elecciones de entretenimiento, dada la magnitud del público al que se dirige. En ese sentido, recalcó que “es uno de los artistas más destacados y populares del mundo”, y que esa es precisamente la meta que buscan alcanzar al seleccionar el espectáculo de medio tiempo.
La designación del artista puertorriqueño —anunciada en septiembre— generó repercusión global e incluso provocó un incremento en las transmisiones de su música.
Aunque Bad Bunny se ha posicionado públicamente en contra de ciertas políticas del expresidente Donald Trump, y optó por una residencia de 31 días en su isla natal como forma de protesta, la NFL reafirma que su elección responde únicamente al interés por ofrecer un espectáculo de alto impacto.
El Super Bowl se celebrará el 8 de febrero en el Levi’s Stadium, en Santa Clara, California.