Por Daniela Suárez.
Hay amores que duelen, hay amores que acompañan, hay amores que enseñan, hay amores que matan. Hay amores que anclan, hay amores que empapan, hay amores que triunfan y otros que desbaratan.
Hay amores que enferman y hay amores que sanan. Hay amores que vuelan y otros que arrebatan. Hay amores que marcan, hay amores que guían. Hay amores que iluminan y otros que se escapan. Hay amores que corrompen y hay amores que fascinan. Hay amores que desvisten y otros que culminan.
Pero en realidad, ¿qué es el amor? El amor es tan sencillo como complejo, tan elevado que parece incierto. El amor es un sentimiento, el amor es estar en desacuerdo. El amor es locura pero también es lo único que a través del tiempo perdura.
El filósofo y ensayista José Ortega y Gasset bien describe al amor en esta frase: “El deseo muere automáticamente cuando se logra: fenece al satisfacerse. El amor en cambio es un eterno insatisfecho”.
Coincido con él. Por más que tratemos de satisfacerlo, por más que intentemos domarlo, el amor es una cualidad que solo comprendemos los seres humanos.
Quizá no sepa mucho de la vida, pero sí hay algo de lo que estoy convencida: el amor es eterno. El amor es lo único que tiene la capacidad de romper las barreras del espacio y del tiempo.
Por supuesto que no todos los amores son amigables; no todos son risas y cosas deseables; pero a pesar de todas las heridas el ser humano es capaz de encontrar siempre las mejores salidas.
¿Cuántas veces te han roto el corazón? Probablemente muchas, como a todos los que tenemos la valentía de sentir. Sin embargo, a pesar de todo, seguimos aquí. A pesar del trago amargo y de los sentimientos encontrados podemos hallar esa flama que nos hace resilientes, sabemos cómo salir de las tormentas, continuamos con la vida y seguimos viviéndola en tiempo presente.
Eternamente
Eso es lo bonito y también lo confuso del amor: que a pesar de todo siempre sigue ahí, nunca muere en nosotros, nunca deja de existir. Nos podemos enamorar tanto una como miles de veces y sin embargo cada amor es una experiencia diferente.
Quizá no sepa lo que es el amor, pues cada ser viviente lo siente de manera diferente, pero creo que el amor es acompañar, el amor es saber estar. El amor es caminar paralelamente y compartir sueños conjuntamente.
Milan Kundera se basa en el mito de la caverna de Platón y describe que “el amor es el deseo de encontrar a la mitad perdida de nosotros mismos”. Aunque tal vez suene a narcisismo puro, concuerdo con su frase. ¿Qué es el amor si no lograr una vida en conjunto? ¿Qué es el amor si no pensar en alguien constantemente? ¿Qué es el amor si no verse reflejado en los ojos de otro?
Alguna vez leí una frase que me hizo percatarme de lo que es el amor: “Hasta que no te olvidan no te mueres”. Y por eso creo que el amor perdura. Mientras alguien nos recuerde, seremos sentidos eternamente.