EN LA RECTA FINAL

“El voto es continuidad o cambio, es confianza o protesta”.

Antonio Caporal
Elecciones 2024
ELECCIONES 2024

Organizaciones sociales, eclesiásticas, académicas y empresariales llaman a participar en los comicios para erradicar el abstencionismo y fortalecer la democracia.

Luego de un prolongado proceso electoral que incluyó las etapas de campaña, intercampaña, precampaña y una especie de preprecampaña y que comenzó prácticamente desde principios de 2023, llegamos al momento de la cuenta regresiva: falta menos de un mes para los comicios del 2 de junio.

Un total de 98 millones 329 mil 591 mexicanos inscritos en la Lista Nominal electoral y que cuenten con su credencial de elector vigente podrán acudir a las 170 mil 401 casillas que se instalarán para sufragar por los más de 20 mil cargos que estarán en jugo en la elección más grande en la historia de México: la Presidencia de la República, ocho gubernaturas, la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, el Senado, la Cámara de Diputados, 31 Congresos locales y mil 802 presidencias municipales de 30 entidades, incluidas las 16 alcaldías de la capital del país.

Candidatos

Tres son las personas que contienden por la Presidencia de la República y son postuladas por coaliciones y partidos políticos; en el actual proceso ningún aspirante logró conseguir el registro como candidato independiente.

Los candidatos son Xóchitl Gálvez, de la coalición Fuerza y Corazón por México, que integran PAN, PRI y PRD; Claudia Sheinbaum, representante de la coalición Sigamos Haciendo Historia, que conforman Morena, PVEM y PT; y Jorge Álvarez, de Movimiento Ciudadano (MC).

Las tres candidaturas han tenido sin duda suficientes oportunidades de dar a conocer sus propuestas para resolver los problemas del país, así como para impulsar el crecimiento económico y el desarrollo de la sociedad.

Además de los múltiples actos proselitistas, los candidatos tuvieron un par de debates organizados por el Instituto Nacional Electoral (INE). En el primero, celebrado el 7 de abril, se contó con la participación de mexicanos mayores de 13 años, quienes tuvieron la oportunidad de enviar sus preguntas a través de las redes sociales y plataformas digitales del organismo electoral.

Los temas para formular las preguntas fueron: educación y salud; transparencia y combate a la corrupción; y no discriminación, grupos vulnerables y violencia en contra de las mujeres.

El segundo debate se realizó el 28 de abril y su formato incluyó nuevamente preguntas formuladas por ciudadanos, pero esta vez a través de videograbaciones.

Personal del instituto llevó a cabo la grabación de las preguntas ciudadanas en las 32 entidades del país y consideró cuatro temas: crecimiento económico, empleo e inflación; infraestructura y desarrollo; pobreza y desigualdad; y cambio climático y desarrollo sustentable.

El tercero y último debate se llevará a cabo el 19 de mayo y en él los candidatos debatirán en torno del tema Democracia y gobierno: diálogos constructivos. En ese encuentro los participantes se cuestionarán cara a cara sobre política social; inseguridad y crimen organizado; migración y política.

Castigar o premiar

En 2000 los votantes mexicanos decidieron terminar con una historia de 70 años del PRI en la Presidencia de la República y dieron el triunfo al PAN; en 2006 la decisión estuvo muy dividida y el ganador, igual del PAN, tuvo una diferencia de apenas medio punto porcentual sobre el segundo lugar; en 2012 el panismo regresó el poder a los priistas por decisión de los votantes; y en 2018 los mexicanos volvieron a optar por la alternancia y sufragaron mayoritariamente por Morena.

Al emitir su voto los electores toman en cuenta los fracasos y los logros de los gobernantes: renuevan la confianza en el régimen y le dan seis años más o bien optan por otro cambio de partido en el poder, como sucedió en 2000, 2012 y 2018.

Es innegable que la actual generación de electores entiende muy bien el valor del voto: sabe decidir, premiar y castigar.

Azucena Rojas, decana de la Escuela de Ciencias Sociales y Gobierno del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey, resalta la importancia de salir a votar el 2 de junio: “No todos los países tienen ese derecho a decidir quiénes son sus gobernantes; nosotros sí lo tenemos y ha sido una lucha de aproximadamente 30 años para que estas elecciones realmente sean democráticas”.

Afirma que “las elecciones van a ser 100% democráticas si la ciudadanía se involucra, participa y ejerce su voto”.

Igualmente, la catedrática aseveró que para emitir un voto informado es necesario conocer las propuestas de los candidatos a los distintos cargos de elección: “En el caso de los candidatos a la Presidencia puedes ingresar a sus páginas oficiales o redes sociales para encontrar la información correspondiente. Si en tu estado hay elecciones de gobernadores, alcaldes, diputados, además de senadores, es necesario que revises quiénes son los candidatos y sus propuestas. Es una oportunidad para ver cómo vamos a premiar o a castigar a los gobernantes de acuerdo con su desempeño”.

El 2 de junio, “con mucha motivación y alegría, hay que salir a votar y ejercer ese derecho que tenemos como mexicanos”, concluye.

La consejera del INE, Dania Paola Ravel Cuevas, asevera que “el voto es continuidad o cambio, es confianza o protesta, es crítica o acompañamiento; pero para las autoridades electorales es el ejercicio de los derechos político electorales que también forman parte de los derechos humanos de la ciudadanía a través de la cual manifiesta su voluntad”.

Agrega que “al igual que un reloj que marca el pulso, el actual proceso como parte de la regularidad democrática que vivimos marca el inicio de una etapa en la que la ciudadanía quiere participar y ser una vez más la protagonista de la toma de decisiones. Es necesario pensar en los procesos electorales como un pilar fundamental de la democracia”.

Vencer el abstencionismo

Desde el inicio del proceso diversas organizaciones de la sociedad, universidades, medios de comunicación y empresarios se han sumado a la promoción de la participación ciudadana en las elecciones.

recta-final2.jpg

Una de las voces con mayor eco y compromiso con la sociedad es la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), la cual emitió un mensaje en el que apuntó: “Esperamos que el Señor nos conceda que este proceso electoral se realice en paz y transparencia, y que todo el pueblo mexicano haga conciencia de su compromiso nacional para que salga a votar y elija dirigentes que busquen sinceramente el bien común”.

Asimismo, la CEM llamó a todos los ciudadanos a participar en lo que a cada uno le toca: “Vigilando con esmero el proceso electoral en su conjunto, hasta la entera jornada del 2 de junio, donde los verdaderos demócratas, como fruto de un proceso ejemplar, deberán reconocer los resultados sin apasionamiento, dejando de lado intereses meramente partidistas y conductas egoístas, poniendo por delante el bien común de nuestro México”.

Afirmó que en México “requerimos campañas electorales que favorezcan el ejercicio del voto libre, informado y secreto, sin manipulaciones ni engaños, sin injerencias indebidas de las autoridades gubernamentales ni de cualquier índole. Lo decimos con toda claridad: ¡deseamos una elección en la que participemos todos! ¡Evitemos cualquier retroceso democrático!”

La CEM concluyó: “No es tiempo de apatía, indiferencia o abstencionismo. Es tiempo de participación y compromiso. Exhortamos a todos los ciudadanos, especialmente a los jóvenes, a informarse, interesarse y tomar sus propias decisiones buscando el bien de la nación”.

A su vez, la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) presentó su programa institucional de participación cívica y desarrollo democrático Participo, Voto, Exijo, que tiene cinco líneas de acción: promover el voto informado y razonado para combatir el abstencionismo; hacer observación electoral durante todo el proceso y el día de la elección; dialogar con los candidatos a la Presidencia; presentar el Acuerdo Nacional por un México con Desarrollo Inclusivo; así como organizar debates y diálogos ciudadanos con candidatos a las gubernaturas.

El organismo indicó que una de las metas de su programa es que se alcance 70% de participación ciudadana en las urnas, porcentaje superior al de 2018, cuando se llegó a 63.4% de participación.

Asimismo, la Coparmex reiteró que es necesario aumentar la participación y por ello su oficina nacional y 40 centros empresariales regionales se han registrado ante el INE como organizaciones promotoras de la participación ciudadana.

“Deseamos que la mayor cantidad de ciudadanos construyamos juntos el futuro de nuestro México a través del voto. Es nuestra obligación, es nuestra responsabilidad, pero también es nuestra prerrogativa combatir y vencer al abstencionismo, la apatía y la actitud de dejar que otros decidan por nosotros”, indicó.

Como en cada proceso electoral, los medios electrónicos de comunicación, es decir, radio y televisión con señal abierta, se sumaron a la promoción de la participación ciudadana.

La Cámara Nacional de la Industria de Radio y Televisión (CIRT) firmó un convenio con el INE para promover la cultura cívica.

El presidente de la CIRT, José Antonio García Herrera, precisó que el acuerdo “busca fomentar la cultura cívica y de participación ciudadana, motivando a los mexicanos para que voten en los procesos electorales con el fin de fortalecer la democracia a través de la realización de programas, proyectos y acciones a favor de México”.

Agregó que los medios masivos de comunicación con mayor cobertura y audiencia en México han “participado activamente para difundir en nuestro país la cultura cívica y de participación ciudadana, motivando a la población para que se involucre y participe. Hemos hecho valer y defender la libertad de expresión como ingrediente principal de la democracia”.

El INE igual firmó un convenio con el Consejo de la Comunicación, donde participan presidentes y directores de empresas, cámaras, asociaciones y confederaciones de los asociados, así como aliados estratégicos del sector social y educativo.

El presidente del Consejo de la Comunicación, Francisco Casanueva, presentó la campaña Me veo, que tiene el objetivo de generar una cultura cívica y de participación, así como motivar a los mexicanos para que asuman su corresponsabilidad como ciudadanos y, de esta forma, se involucren, participen, confíen y voten en el proceso electoral 2024.

El INE también firmó un convenio con la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio, Servicios y Turismo con el objetivo de fomentar la educación ciudadana para el ejercicio libre, responsable e informado del voto, así como impulsar la observación electoral en la jornada comicial del 2 de junio.

recta-final3.jpg

Lo bueno, lo malo y lo feo

Sin duda, lo bueno es que la parte fundamental de los comicios, es decir, la recepción y conteo de votos, es responsabilidad de los ciudadanos.

En un mensaje dirigido a los ciudadanos y participantes de la contienda el INE recordó que nuestros constituyentes eligieron la vía democrática para dirimir nuestras diferencias a través del voto y destacó: “El voto es, sin duda, el mayor igualador social, lo mismo vale el del mexicano habitante de áreas campesinas como el de zonas urbanas o metropolitanas”.

El organismo celebró que “las elecciones en nuestro país son ciudadanas de origen, de forma y de fondo, pues en ellas participan en toda su estructura ciudadanos, desde la conformación de los consejos locales y distritales, observadores electorales, funcionarios de mesas directivas de casilla, así como todas aquellas que se suman para participar como capacitadores asistentes y supervisores electorales”.

En este sentido, señaló el instituto, se puede afirmar que “la ciudadanía contribuye al desarrollo de elecciones libres, auténticas y democráticas, para la renovación de los poderes públicos del Estado mexicano”. Y justo por esta participación ciudadana es que existe confianza en las elecciones.

Como bien sabemos, el INE instalará 170 mil 401 casillas, distribuidas en los 300 distritos electorales ubicados en las 32 entidades del país.

Para recibir y contar los votos, cada casilla contará con una mesa directiva conformada por nuestros vecinos. En total, el INE capacitó dos millones 834 mil ciudadanos; de ellos un millón 533 mil 912 serán los funcionarios propietarios y el resto serán suplentes.

En cuanto a lo malo del proceso electoral tenemos que los partidos políticos ocupan tiempo gratuito en radio y televisión para transmitir más de 52 millones de spots (precampaña, intercampaña y campaña) en los que formulan múltiples ataques dirigidos hacia sus adversarios y casi ninguna propuesta concreta.

Además, los partidos políticos nacionales disponen de un financiamiento público superior a los diez mil 444 millones de pesos para sus gastos ordinarios y de campaña en este 2024; a esta cifra hay que sumar otros ocho mil 836 millones de pesos que se entregan a los partidos políticos con registro local (estatal).

Desde hace décadas ha sido una exigencia de la sociedad reducir los montos de financiamiento, pero ninguna fuerza política, por supuesto, apoya esta propuesta.

En cuanto a lo feo, tenemos que los procesos electorales en México tienen como una de sus principales características el fenómeno denominado “judicialización”. Esto es, la considerable cantidad de denuncias que los partidos y candidatos interponen unos contra otros.

Con sus denuncias e impugnaciones y, como ya es costumbre, con el desconocimiento de los resultados electorales, los partidos y candidatos abonan para que los comicios terminen en los tribunales electorales (federal o estatales) en busca de “ganar en la mesa” lo que no ganaron en las urnas.

El problema es añejo y es producto de la nula seriedad, la ambición y falta de compromiso con el cumplimiento de la ley por parte de partidos políticos y candidatos; una ley que, por cierto, fue diseñada y aprobada por ellos mismos en el Congreso de la Unión.

En el actual proceso, el INE ya registra más de 300 expedientes de procedimientos especiales sancionadores; en tanto que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) calcula que durante todo el proceso electoral 2023-2024 recibirá alrededor de 18 mil denuncias.