El máximo órgano jurisdiccional electoral ha construido una noción de integridad como una herramienta de análisis para identificar las prácticas que pueden manipular el proceso comicial al sustituir un interés público por el beneficio personal o partidista, aseguró el magistrado de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), Felipe Fuentes Barrera.
Tras referirse al debate sobre una probable reforma a las atribuciones del TEPJF, el magistrado Felipe Fuentes dijo sumarse a los deseos de que se haga el ejercicio de un parlamento abierto para discutir esta propuesta de reforma constitucional en la que se ha adelantado que el Tribunal Electoral dictará sus resoluciones conforme al límite del tenor literal de la ley.
Enfatizó que en la actualidad los tribunales constitucionales deben entenderse como garantes de la Constitución y de un correcto funcionamiento de la estructura constitucional. Sin embargo, advirtió que no se puede ser correctos garantes de esa estructura y de esa funcionalidad si se limita a una interpretación literal.
Puntualizó que la sociedad mexicana tiene que participar más de cerca, no solo con las tareas del Tribunal Electoral, como lo ha venido haciendo dado que sus sentencias están sujetas al debate público y al escrutinio de la academia, sino también con un parlamento abierto y permitir el análisis y la discusión de sus iniciativas frente a la voluntad de la sociedad en su conjunto.