EU: DONALD TRUMP AVANZA HACIA LA NOMINACIÓN REPUBLICANA

“Joe Biden enfrenta un panorama adverso rumbo a la elección presidencial”.

Ángel Hernández
Elecciones Estados Unidos
EU DONALD TRUMP

En el arranque de las elecciones primarias para la elección de los aspirantes de los partidos Demócrata y Republicano a la Casa Blanca, todo apunta a que Trump y Biden volverán a encontrarse en la contienda presidencial.

Con su victoria en las elecciones primarias de Iowa y Nueva Hampshire, el expresidente Donald Trump se encamina con fuerza para lograr su tercera nominación a la elección presidencial por el Partido Republicano, aunque faltan todavía las juntas de elección de delegados en 49 estados.

La condición de favorito del magnate inmobiliario quedó ratificada en las dos jornadas de la etapa preliminar en la que los partidos deciden a quién elegirán a la presidencia (caucus), a lo que se suma el retiro de la contienda del gobernador de Florida, Ron DeSantis, quien era considerado su adversario más fuerte y con más posibilidades de disputarle la nominación republicana.

El presidente Joe Biden logró también su primer triunfo en la primaria de Nueva Hampshire, con lo que desde esta etapa temprana del proceso electoral estadunidense los analistas prevén una segunda confrontación entre el actual mandatario y Trump, como ocurrió en la elección presidencial de 2020, comicios envueltos en la polémica por la negativa trumpista de reconocer su derrota, una posición que sumió a ese país en una grave crisis institucional cuando sus simpatizantes tomaron el Capitolio.

Ventaja

El arranque de los procesos internos de los dos grandes partidos de la Unión Americana rumbo a la elección presidencial del 5 de noviembre puso en movimiento la maquinaria electoral republicana en un entorno de amplia preferencia por el exmandatario neoyorquino, de acuerdo con diversos sondeos realizados en ese país.

Dicha ventaja inicial en las encuestas propició que Trump se diera el lujo de no acudir a los debates con los otros aspirantes republicanos, un desdén no extraño en un personaje que ya da por ganada la contienda para la nominación presidencial pese a que Nikki Haley, la otra abandera republicana, descartó bajarse del proceso interno por lo menos hasta el caucus en Carolina del Sur, estado del que fue gobernadora.

Con su victoria en Nueva Hampshire el exmandatario afianzó su control sobre la candidatura presidencial republicana y aumenta las probabilidades de una revancha contra el presidente Biden.

Pese a que no arrasó a la exembajadora estadounidense en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como se preveía, Trump logró en Nueva Hampshire refrendar la alta preferencia electoral que prevalece entre los republicanos.

Con la renuncia de DeSantis a seguir en la contienda republicana para buscar la nominación republicana a la Casa Blanca, Haley obtuvo 43% de los votos contra 55% de Trump en Nueva Hampshire; y pese a que se le dan pocas posibilidades de derrotar al exmandatario, anunció que se mantendrá por lo menos hasta las primarias que tendrán lugar en su tierra natal.

Sin embargo, los simpatizantes de Trump aumentaron su presión sobre Haley para que esta abandone la contienda, ante lo cual la exrepresentante ante la ONU afirmó que “la pelea está lejos de terminar: hay decenas de estados por delante”.

Mantiene apoyo

Trump se convirtió en el primer precandidato presidencial republicano que gana las contiendas en Iowa y Nueva Hampshire desde que ambos estados empezaron a encabezar el calendario electoral en 1976, lo que los expertos consideran un signo sorprendente de la rapidez con que los republicanos han cerrado filas para convertirlo en su candidato por tercera vez consecutiva.

Con sus triunfos en ambos estados, Trump demuestra su capacidad de unir a las facciones del Partido Republicano, además de que ha conseguido el apoyo de los conservadores evangélicos, que son influyentes en Iowa, y de los votantes más moderados de Nueva Hampshire, una fuerza que espera replicar en la elección general.

De acuerdo con los análisis de la votación el expresidente logró resultados sólidos en las zonas más conservadoras, en tanto que Haley ganó en las partes más progresistas.

Según VoteCast, una encuesta de los votantes del estado, cerca de la mitad de los electores en las primarias republicanas de Nueva Hampshire dijeron que están muy o algo preocupados de que Trump sea muy extremo para ganar las elecciones presidenciales; solo un tercio dijo lo mismo sobre Haley.

Las perspectivas de Haley para convertirse en candidata republicana son cada vez más estrechas puesto que no participará en las primarias de Nevada, donde Trump es amplio favorito, y reaparecerá hasta la asamblea de Carolina del Sur programada para el 24 de febrero.

Como exgobernadora del estado Haley espera que un sólido desempeño en la entidad pueda impulsarla hasta las primarias del Supermartes del 5 de marzo (fecha en que gran cantidad de estados realizan elecciones primarias), aunque tiene la condición en extremo difícil por tratarse de un estado conservador donde Trump es muy popular.

Panorama adverso

El presidente Biden obtuvo por su lado la victoria en las primarias demócratas en Nueva Hampshire mediante una fórmula en la que los votantes escribían su nombre en la boleta, debido a que el Comité Nacional Demócrata votó a favor de comenzar sus primarias en febrero en Carolina del Sur.

Nueva Hampshire adelantó una consulta para la que Biden no hizo campaña ni aparecía en las boletas, pero quedó por delante de varios aspirantes poco conocidos.

Así, el camino de Biden para volver a ser nominado aspirante presidencial se encuentra despejado porque el resto de los demócratas que buscan ser abanderados no cuentan con un gran apoyo en las preferencias electorales, lo que apunta a que la elección presidencial de noviembre repetirá la contienda de hace cuatro años entre Trump y Biden.

Sin embargo, a diez meses de los comicios el actual presidente enfrenta un panorama adverso por las críticas de los republicanos a su gobierno, en particular con relación al tema migratorio y el asunto de la seguridad, además de que las encuestas muestran que el alto apoyo republicano y de grupos extremos de la política estadunidense a Trump tienen al republicano como favorito para ganar la elección presidencial.

De acuerdo con el más reciente sondeo realizado por Reuters/Ipsos tras las primarias de Iowa y Nueva Hampshire, Trump se encuentra arriba seis puntos sobre Biden, con 40 contra 34% de las preferencias, respectivamente, en tanto que el resto respondió que no está seguro o piensa votar a otra persona o a nadie.

La muestra se realizó entre mil 250 adultos de todo el país y tiene un margen de error de tres puntos porcentuales.

Mismos candidatos

Este resultado significa un avance para Trump, ya que una encuesta de Reuters/Ipsos de principios de mes mostraba un empate entre él y Biden, pero la encuestadora precisó que un sondeo a escala nacional no capta las sutilezas de la contienda electoral que se decidirá en noviembre en algunos estados que son clave para ganar la presidencia.

Alrededor de 67% de los encuestados entre el lunes y el miércoles afirmó estar “cansado de ver a los mismos candidatos en las elecciones presidenciales y quieren a alguien nuevo”; y aun así solo 18% dijo que no votaría si Biden y Trump fueran su opción.Tanto Biden como Trump parecen listos para la revancha tras las victorias consecutivas de Trump en Iowa y Nuevo Hampshire, con la Casa Blanca considerando a Trump como un rival abordable y Trump enojado porque Haley no abandonó inmediatamente la carrera republicana.La ventaja de seis puntos de Trump se mantuvo pese a que se dio a los encuestados la opción de votar a candidatos de terceros partidos, incluido el activista antivacunas Robert F. Kennedy Jr., con 36% de apoyo a Trump, 30% por ciento a Biden y 8% a Kennedy.

Campaña y juicios

Las victorias iniciales de Donald Trump en las primarias republicanas llaman la atención toda vez que el expresidente enfrenta 91 cargos penales, que van desde tratar de revocar el resultado de las elecciones presidenciales de 2020 hasta gestionar de forma inadecuada documentos clasificados y organizar pagos a una actriz porno.

Trump abandonó la Casa Blanca en enero de 2021, días posteriores a una insurrección en el Capitolio de Estados Unidos liderada por sus seguidores, quienes intentaron detener la certificación de la victoria de Biden.

El exmandatario, además de su polémica gestión, es el primer presidente de la Unión Americana que ha enfrentado dos juicios políticos.

Para los analistas en ese país, más allá de las vulnerabilidades políticas asociadas a los procesos penales Trump enfrenta un desafío logístico de compaginar juicios y campañas.

De hecho, a menudo ha convertido sus comparecencias penales y judiciales en actos de campaña, con conferencias de prensa televisadas que le han permitido difundir su mensaje y ampliar su público.