Washington, Estados Unidos, 12 de agosto. El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, extendió una tregua comercial con China por otros 90 días, retrasando una vez más un peligroso enfrentamiento entre las dos economías más grandes del mundo.
Trump publicó en su plataforma Truth Social que firmó la orden ejecutiva para la prórroga, y que “todos los demás elementos del acuerdo permanecerán iguales”. Beijing también anunció la extensión de la pausa arancelaria, según el Ministerio de Comercio.
La fecha límite anterior eran las 00:01 del martes. Si ese plazo hubiera expirado, Estados Unidos podría haber aumentado los impuestos sobre las importaciones chinas, que actualmente son de 30%, y Beijing podría haber respondido aumentando los aranceles de represalia sobre las importaciones de productos estadunidenses.
La pausa da tiempo a los dos países para resolver algunas de sus diferencias, quizás allanando el camino para una cumbre más adelante este año entre Trump y el presidente chino Xi Jinping, y ha sido bienvenida por las empresas estadunidenses que hacen negocios con China.
Sean Stein, presidente del Consejo Empresarial Estados Unidos-China, señaló que la extensión es “crucial” para dar tiempo a los dos gobiernos para negociar un acuerdo comercial que las empresas estadounidenses esperan mejore su acceso al mercado en China y proporcione la certeza necesaria para que las empresas hagan planes a mediano y largo plazo.
“Conseguir un acuerdo sobre el fentanilo que conduzca a una reducción de los aranceles estadounidenses y a frenar las medidas de represalia de China es urgentemente necesario para reiniciar las exportaciones agrícolas y energéticas de Estados Unidos”, comentó Stein.
China anunció este martes que ampliará las medidas de alivio a las empresas estadounidenses que fueron colocadas en una lista de control de exportaciones y otra de entidades no fiables. Después del anuncio inicial de Trump de aranceles en abril, Beijing restringió las exportaciones de bienes de doble uso a algunas empresas estadounidenses, mientras prohibía a otras comerciar o invertir en el país. El Ministerio de Comercio señaló que paralizaría esas restricciones para algunas compañías, mientras que a otras les daría otra prórroga de 90 días.
Alcanzar un pacto con China sigue siendo un asunto pendiente para Trump, quien ya ha trastocado el sistema comercial global al imponer aranceles de dos dígitos a las importaciones provenientes de casi todos los países del mundo.