Inundaciones en Filipinas dejan 51 muertos

Casi nueve mil personas permanecen en albergues

Redacción
Internacional
Rescatistas trasladan a una anciana en Plaridel, Filipinas.
Foto: AP

Manila, Filipinas, 2 de enero. El número de muertos por las inundaciones masivas que devastaron partes de Filipinas durante el fin de semana de Navidad aumentó a 51, informó la agencia nacional de respuesta a desastres, mientras los afectados luchan por recuperarse.

Las fotos en las redes sociales mostraban a las personas de la provincia de Misamis Occidental en el norte de Mindanao barriendo el lodo espeso de los pisos de sus casas. En el pueblo costero de Cabol-anonan, los cocoteros fueron arrancados de raíz y las chozas hechas de material liviano prácticamente arrasadas.

La región del norte de Mindanao en el sur llevó la peor parte del desastre, reportando 25 muertes, según el Consejo Nacional de Gestión y Reducción del Riesgo de Desastres. La mayoría de las muertes se debieron a ahogamientos y deslizamientos de tierra, y entre los desaparecidos había pescadores cuyas embarcaciones naufragaron.

Las inundaciones han disminuido en la mayoría de las áreas afectadas por el mal tiempo que interrumpió las celebraciones navideñas en el este, centro y sur de Filipinas. Pero más de ocho mil 600 de las casi 600 mil personas afectadas permanecen en refugios de emergencia.

Más de cuatro mil 500 casas resultaron dañadas por las inundaciones, junto con carreteras y puentes, y algunas áreas aún tienen interrumpido el suministro de agua y electricidad, indicó la agencia de gestión de desastres. El gobierno envió alimentos y otros artículos esenciales a los residentes afectados por las inundaciones, desplegó equipos pesados para las operaciones de limpieza y proporcionó láminas de hierro y kits de reparación de viviendas, dijeron las autoridades. Se enviaron equipos de la capital, Manila, para ayudar a las comunidades con agua limpia limitada a instalar sistemas de filtración de agua.

Al menos 22 ciudades y municipios han declarado estado de calamidad, dijo el consejo de gestión de desastres. La medida permitirá la liberación de fondos de emergencia y acelerará los esfuerzos de rehabilitación