NACIONES UNIDAS — El subsecretario general para Asuntos Humanitarios de la ONU, Martin Griffiths, y los dirigentes de dos importantes organizaciones internacionales de ayuda se encuentran en Afganistán una semana después de que la mujer de mayor rango de Naciones Unidas encabezara una delegación al país con el mismo objetivo: Revertir la represión del Talibán contra las mujeres y niñas, incluida la prohibición a que trabajen para organizaciones humanitarias nacionales e internacionales.
El portavoz de la ONU, Stephane Dujarric, dijo que Griffiths estuvo el lunes en la capital afgana acompañado de Janti Soeripto, directora general de Save the Children de Estados Unidos, y Sofia Sprechmann Sineiro, secretaria general de Care International, así como de Omar Abdi, subdirector ejecutivo de la UNICEF, la agencia para la infancia de la ONU.
Dujarric dijo que la prohibición que el Talibán impuso el mes pasado a que las mujeres trabajen para organizaciones no gubernamentales ha puesto en pausa algunos programas de ayuda y que está “sembrando el temor de que la grave situación humanitaria en Afganistán empeore todavía más”.
Alrededor de 28 millones de afganos necesitan alimentos, medicamentos y otro tipo de ayuda humanitaria, “un aumento del 350% en tan sólo cinco años”, de acuerdo con el reporte más reciente dado a conocer el lunes por la Revisión de Necesidades Humanitarias para Afganistán, señaló Dujarric.
El portavoz adjunto de la ONU, Farhan Haq, dijo el viernes pasado que la delegación que encabezó la subsecretaria general de la ONU, Amina Mohammed, encontró que algunos funcionarios talibanes estaban más abiertos a la idea de restablecer los derechos de las mujeres, pero que otros claramente estaban en contra.
“Lo fundamental es conciliar a los funcionarios que han conocido y que se han mostrado más abiertos, con los que no lo han sido”, comentó Haq.
Mohammed, exministra del gabinete de Nigeria y actualmente la mujer de mayor rango dentro de la ONU, estuvo acompañada por Sima Bahous, directora ejecutiva de ONU Mujeres, organismo que promueve la igualdad de género y los derechos de las mujeres, y por el subsecretario general de asuntos políticos, Khaled Khiari.
La delegación de la ONU se reunió con miembros del Talibán en la capital Kabul y en la ciudad sureña de Kandahar, pero la ONU no dio a conocer el nombre de los funcionarios del Talibán. Las reuniones se enfocaron en las restricciones que ha impuesto el Talibán a las mujeres y niñas desde su ascenso al poder en agosto de 2021, durante las últimas semanas del retiro de la presencia militar de Estados Unidos y la OTAN luego de 20 años de guerra.
Se tiene previsto que Griffiths se enfoque particularmente en revertir a la prohibición implementada en diciembre, la cual que impide que las mujeres trabajen en organizaciones no gubernamentales. Naciones Unidas ha señalado que las afganas desempeñan un papel crucial en la entrega de ayuda humanitaria a los civiles, en su mayoría mujeres y niños.