Tensiones entre China y EU alcanzan un momento crucial

Ambiciones de la superpotencia en ascenso chocan con la ya establecida

Redacción
Internacional
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Beijing, Jul 24. Cuatro décadas después de que Estados Unidos estableciera relaciones diplomáticas con China comunista, las tensiones entre ambas naciones pueden haber alcanzado un momento crucial. Ha sido un camino que siempre fue complicado debido a que las ambiciones de la superpotencia en ascenso chocaban cada vez con más frecuencia con los de la superpotencia establecida.

China ordenó el viernes el cierre del consulado estadounidense en la ciudad suroccidental de Chengu, en una veloz represalia por el cierre de su consulado en Houston. Hace dos semanas, el ministro chino del exterior, Wang Yi, preguntó en voz alta si las relaciones podrían mantenerse normales. El jueves, el secretario norteamericano de Estado, Mike Pompeo, respondió: llegó la hora de cambiar de curso.

“El viejo paradigma del compromiso ciego con China simple y sencillamente no funciona”, dijo Pompeo en un discurso en la Biblioteca Presidencial Richard Nixon en el sur de California. “No debemos mantenerlo. No debemos volver a él”.

La visita de Nixon a China en 1972 fue la primera de un mandatario estadounidense desde que los comunistas tomaron el poder en 1949, poniendo de cabeza un paradigma de la Guerra Fría y allanando el camino a la normalización de las relaciones en 1979.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Estados Unidos había sido un aliado estrecho del dirigente chino Chiang Kai-shek y durante tres décadas reconoció a Taiwán como el verdadero gobierno chino después de que Chiang huyera hacia esa isla tras perder el control del territorio continental en 1949.

Las relaciones entre Washington y el gobierno comunista de Beijing comenzaron a deshielarse en la década de 1970 a la par del deterioro de los vínculos entre China y la Unión Soviética mientras el gobernante Mao Zedong buscaba un contrapeso frente a su vecino más poderoso.

Un nuevo dirigente, Deng Xiaoping, visitó Estados Unidos en 1979 después del establecimiento de los lazos diplomáticos y sonreía para los fotógrafos mientras se probaba un sombrero de vaquero en Texas. El consulado de Houston cerrado en fecha reciente había abierto el mismo año. Era el primero de China en Estados Unidos.

Dejando de lado las diferencias políticas, Estados Unidos y China fomentaron los vínculos económicos, sociales y culturales, brevemente interrumpidos una década después debido a la represión militar en China contra las manifestaciones de 1989 a favor de la democracia en la Plaza de Tiananmen en Beijing.

Los vínculos económicos aumentaron exponencialmente en los años siguientes debido a las fuertes inversiones de empresas estadounidenses en China, derivando a la larga en superávits comerciales para el país asiático por 350.000 millones de dólares anuales.

La relación no ha estado exenta de episodios de tensión. Estados Unidos ha mantenido su apoyo militar a Taiwán y en 1996 el gobierno del presidente Bill Clinton envió un portaviones al estrecho de Taiwán después de que China disparara misiles hacia la isla.

En 2001, un jet caza chino y un avión de vigilancia de la Marina de Estados Unidos colisionaron en el mar de China Meridional, una importante ruta marítima en la región de

El año electoral en Estados Unidos atiza las tensiones y el presidente Donald Trump parece aprovechar las fricciones con China para agitar el apoyo entre su base de simpatizantes. Se reelija Trump o no en noviembre, es una situación que no eliminará las persistentes diferencias.