VILLEROUGE LA CREMADE, Francia, agosto 8.- Los bomberos que ayudaron a contener el mayor incendio forestal en décadas en Francia se mantenían en alerta máxima el viernes, con pronósticos de altas temperaturas que podrían reavivar las llamas en el sur del país. Los incendios provocaron evacuaciones en otras partes de la zona mediterránea.
El fuego en la región vinícola de Aude en Francia cobró una vida y se expandió rápidamente por más de 160 kilómetros cuadrados (62 millas cuadradas) durante tres días en un clima caluroso y seco, obligando a cientos de residentes a abandonar sus hogares.
Las autoridades locales señalan que se debe permanecer alerta durante el fin de semana, ya que se espera que los termómetros superen los 30 grados Celsius (86 grados Fahrenheit) durante otra ola de calor.
Por su parte, los incendios forestales obligaron a las autoridades a ordenar evacuaciones cerca de la capital griega y en el norte de Turquía, donde las autoridades también tuvieron que suspender temporalmente el tráfico marítimo a través de los Dardanelos debido al humo.
En Francia, el gobernador de la región, Christian Pouget, dijo que unas 1.000 personas no han podido regresar aún a sus casas después que el fuego arrasara 15 comunas en la región montañosa de Corbières, destruyendo o dañando al menos 36 viviendas. Una persona murió en su casa y al menos 21 más resultaron heridas, incluidos 16 bomberos, según las autoridades locales.