Nueva York, 1 de julio. Una jueza federal revisa la naturaleza de las batallas de rap y el juego de palabras mordaz en “Not Like Us” de Kendrick Lamar, el superéxito que provocó una demanda por difamación de otro astro del rap, Drake.
Drake demandó a Universal Music Group, el sello discográfico al que pertenece al igual que Lamar, por “Not Like Us”, alegando que la compañía publicó y promovió una canción que él considera calumniosa. Universal afirma que las letras son solo hipérboles en la tradición de las disputas, conocidas coloquialmente como batallas o tiraderas, del rap y la música urbana. El sello está tratando de que se desestime el caso.
La jueza Jeannette Vargas no tomó una decisión inmediata después de una animada audiencia el lunes, cuando la creatividad cruda del hip hop se enfrentó a los confines formales del tribunal federal.
"¿Quién es el oyente común? ¿Es alguien que va a captar todas esas referencias?”, se preguntó Vargas en voz alta, abordando un estándar legal que se refiere a cómo una persona promedio y razonable entendería una declaración. “Hay tanto de especializado y matizado en estas letras”.
Polémica canción
El caso surge de una épica disputa entre dos de los mayores astros del hip hop sobre una de las canciones más grandes de 2024, que ganó los premios Grammy al disco del año y a la canción del año, obtuvo la mayor cantidad de reproducciones en Apple Music a nivel mundial y ayudó a que el espectáculo de medio tiempo del Super Bowl de principios de año fuera el más visto de la historia.
Lanzada mientras los dos artistas intercambiaban una ráfaga de pistas con insultos, la canción de Lamar menciona al canadiense Drake por su nombre y cuestiona su autenticidad, calificándolo de “colonizador” de la cultura del rap que “no es como nosotros” en el territorio natal de Lamar en Compton, California, y, más ampliamente, en el rap de la Costa Oeste.
“Not Like Us” también hace insinuaciones sobre la vida sexual de Drake, incluyendo frases como “He oído que te gustan jóvenes” y "¿Amante certificado? Pedófilos certificados”, implicaciones que él rechaza.
La demanda de Drake afirma que la canción equivale a “acusarlo falsamente de ser un delincuente sexual, de participar en actos pedófilos” y más. Alegando que la pista lo puso en peligro al avivar nociones de justicia por mano propia, la demanda culpa a “Not Like Us” no solo por dañar la imagen de Drake, sino por intentos de allanamiento y el tiroteo de un guardia de seguridad en su casa de Toronto. La mansión fue representada en una foto aérea en la portada de la canción.
“Esta canción logró una ubicuidad cultural como ninguna otra canción de rap en la historia”, dijo el abogado de Drake, Michael Gottlieb. Argumentó que Universal había hecho campaña y había maquinado para convertirla en “un himno nacional de facto” que no solo se dirigía a los fanáticos del hip hop que conocían la historia de fondo y estaban acostumbrados a las batallas líricas exageradas.
El oyente promedio podría ser “un niño de 13 años que está bailando la canción en un bar mitzvah”, sugirió Gottlieb.
“Eso sería un bar mitzvah muy interesante”, opinó la jueza. (La canción, de hecho, ha sido tocada en algunas de esas celebraciones).
Mientras tanto, Universal ha enfatizado que “Not Like Us” fue parte de un intercambio de pullas entre Drake y Lamar.
“El contexto es clave”, argumentó el abogado del sello, Rollin Ransom, el lunes, disculpándose por tener que usar blasfemias mientras recitaba algunas de las letras que Drake dirigió a Lamar en una pista llamada “Taylor Made Freestyle”.
“Lo que escuchas en estas batallas de rap es hablar basura en extremo, y no es, y no debería ser tratado como, declaraciones de hecho”, dijo el abogado.
La demanda busca daños y perjuicios no especificados.
Drake también arremetió contra iHeartMedia, alegando en una petición legal en Texas que el gigante de la radio recibió pagos ilegales de Universal para aumentar la difusión de “Not Like Us”. IHeartMedia ha negado cualquier irregularidad. Esa disputa se resolvió en marzo.
Drake no ha demandado a Lamar directamente.