ELECCIONES EN EU: EL MUNDO EN VILO

“Trump vuelve a utilizar la migración como punta de lanza de su campaña”.

Ángel Hernández
Internacional
Elecciones EU

El exmandatario republicano y el presidente demócrata Joe Biden intentarán convencer a un electorado estadunidense cada vez más escéptico respecto de sus capacidades para un nuevo mandato de cuatro años.

Se confirma la revancha entre Joe Biden y Donald Trump por la presidencia de Estados Unidos: una vez logrado el número de delegados necesarios para tener la mayoría en la convención de los partidos Demócrata y Republicano, respectivamente, será un mero trámite que ambos formalicen sus candidaturas y en noviembre vuelvan a enfrentarse en la contienda electoral por la Casa Blanca, como ocurrió en 2020.

A cuatro años del triunfo de Biden, desconocido por Trump —quien aseguró que su derrota en las urnas fue por fraude—, el actual mandatario y el expresidente intentarán convencer a un electorado estadunidense cada vez más escéptico respecto de las capacidades de ambos personajes para un nuevo mandato, por la edad que tendrán al momento de rendir protesta al cargo: 81 y 77 años.

Cuando faltan ocho meses para la elección presidencial en la Unión Americana, las preferencias electorales le otorgan ventaja a Trump, aunque las perspectivas de los expertos en ese país apuntan a que habrá una contienda cerrada, donde los temas de economía, migración, seguridad en la frontera sur y riesgos para la democracia serán los que graviten en el ánimo de los ciudadanos a la hora de emitir su voto.

Segundo duelo

Han concluido más de la mitad de las asambleas primarias presidenciales del proceso electoral en Estados Unidos y Biden y Trump alcanzaron ya el número de delegados necesarios para obtener la mayoría en la nominación presidencial. En el caso de los demócratas es de mil 968 y del lado republicano la cifra es de mil 215.

Estos delegados surgen de asambleas partidistas (caucus) a cargo de los gobiernos estatales y locales, donde los participantes emiten su voto de manera secreta. Las asambleas se realizan a nivel de condado o distrito electoral y la mayoría de los participantes se dividen en grupos dependiendo del candidato al que apoyan. Al final, el número de votantes en cada grupo determina cuántos delegados ganó cada candidato.

Biden y Trump son los aspirantes favoritos desde que inició el actual proceso electoral sin que prácticamente ningún contrincante pudiera arrebatarles la nominación.

En el caso del magnate inmobiliario, enfrentó la oposición de la exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, quien contaba con el apoyo de algunos sectores republicanos, pero al final decidió abandonar la contienda no sin antes lograr victorias en Vermont y en el Distrito de Columbia, capital de la Unión Americana.

Una vez superado el trámite de las asambleas primarias, Biden y Trump no han perdido tiempo para embestirse mutuamente de cara a la elección del 5 de noviembre: en actos proselitistas y de gobierno han advertido de los riesgos que representa su respectivo rival para los estadunidenses y el futuro del país.

Bajo ataque

Biden se lanzó contra Trump durante su discurso sobre el Estado de la Unión el jueves 7 de marzo, al acusarlo de inclinarse ante el presidente de Rusia, Vladimir Putin. Afirmó que él no se inclinará ante el líder ruso, quien comenzó en 2022 una invasión a Ucrania.

Ante congresistas demócratas y republicanos, el presidente aseveró que la libertad y la democracia están bajo ataque en EU y destacó que “mi predecesor, un exmandatario republicano, le dice a Putin: ‘Haz lo que quieras’, lo que es escandaloso, peligroso e inaceptable”.

Biden recordó en su mensaje a los estadunidenses el asalto al Capitolio el 6 de enero de 2021 por parte de simpatizantes de Trump, quien los azuzó para tratar de impedir que los representantes de la cámara baja y los senadores calificaran la elección que dio el triunfo al candidato demócrata.

El mandatario demócrata acusó que “mi predecesor y algunos de ustedes aquí buscan enterrar la verdad del 6 de enero. Yo no haré eso. Este es el momento de decir la verdad y enterrar las mentiras”.

Y subrayó que “esta es la verdad: no puedes amar a tu país solo cuando ganas. Como he hecho desde que fui elegido para el cargo, les pido a todos, sin distinción de partidos, que se unan y defiendan nuestra democracia. Recuerden su juramento de defenderla contra todas las amenazas, extranjeras y nacionales”.

Inmigrantes

El presidente defendió la Ley de Seguridad Fronteriza que envió al Congreso luego de una intensa negociación bipartidista y que prevé recursos por 118 mil millones de dólares para reforzar la seguridad en la frontera sureste y endurecer las leyes de asilo, así como lograr fondos para Ucrania e Israel, la cual se encuentra congelada en el Congreso por legisladores republicanos y por el propio Trump.

Biden se desmarcó en su mensaje del discurso antimigrante republicano, al subrayar que su política migratoria no demonizará a los inmigrantes ni separará a las familias. “Esto es lo que no voy a hacer: no demonizaré a los inmigrantes diciendo que envenenan la sangre de nuestro país (como afirma Trump); no separaré a familias; no prohibiré la entrada a Estados Unidos a la gente por su fe”, aseveró.

Reiteró la necesidad de que los congresistas saquen adelante un acuerdo legislativo bipartidista, que en su opinión solucionará el sistema migratorio, pese a las críticas de organizaciones humanitarias que reprochan la imposición de mayores restricciones en la frontera sureste a cambio de un nuevo paquete económico de ayuda a Ucrania.

“Esto es Estados Unidos. Todos venimos de alguna parte, pero todos somos estadunidenses. Podemos pelear por la frontera o podemos arreglarla. Estoy preparado para arreglarla. ¡Mandadme la ley sobre la frontera ya!”, instó a los congresistas.

Incita temor

Trump, como lo hizo en sus procesos electorales previos (2016 y 2020), volverá a utilizar la migración como punta de lanza de su campaña presidencial, junto con la inseguridad en la frontera con México y lo que llama el fracaso de la economía de EU en los últimos cuatro años.

Durante su primer mitin de campaña en el estado de Georgia (fundamental en sus aspiraciones presidenciales), el expresidente volvió a utilizar un discurso antimigrante para mantener vivos los temores hacia las personas indocumentadas.

Expuso a sus simpatizantes que el continuo aumento de migrantes a través de la frontera sur es como “la agonía de nuestro pueblo, el saqueo de nuestras ciudades, el saqueo de nuestros pueblos, la violación de nuestros ciudadanos y la conquista de nuestro país”.

Calificó a quienes cruzan la frontera de manera ilegal como criminales violentos, de quienes dijo hacen daño a los estadunidenses. Y reiteró que de ganar la presidencia restablecerá las políticas de línea dura aplicadas en su mandato de 2017-2020, para “detener la invasión de nuestra frontera sur y comenzar la mayor operación de deportación interna en la historia de Estados Unidos”.

La nueva contienda entre Biden y Trump por la Casa Blanca pondrá otras vez a los estadunidenses a decidir entre continuar con el proyecto del mandatario demócrata, un gobierno que ha enfrentado críticas por su manejo migratorio y la seguridad en la frontera sur, pero que ha logrado un avance importante en materia económica; o apostar de nuevo por una administración disruptiva, agresiva y antimigrante como se prevé sea el gobierno de Trump.

Nueva fecha de juicio

El expresidente Donald Trump irá a juicio por el pago a la actriz porno Stormy Daniels el 15 de abril, anunció el juez de la causa, con lo que se convertirá en el primer expresidente de Estados Unidos en enfrentar un juicio penal. La decisión del juez Juan M. Merchan garantiza que el procesamiento será el primero de cuatro casos penales contra Trump en llegar a juicio, con el virtual candidato republicano frente a un jurado en la ciudad donde construyó un imperio empresarial hace décadas y ganó estatus de celebridad. El juicio estaba previsto para el lunes 25 de marzo y se encontraba en el limbo tras la gran cantidad de documentos presentados por la defensa del exmandatario de último momento, lo que provocó el aplazamiento de la fecha original. Por su parte, una corte de apelaciones de Nueva York postergó la multa por fraude de más de 454 millones de dólares impuesta a Trump, si este paga 175 millones en diez días. Si paga se detendrá el reloj en cuanto al cobro de penalidades y le impedirá al Estado confiscarle bienes. Trump enfrenta 91 cargos penales que van desde tratar de revocar el resultado de las elecciones presidenciales de 2020 a gestionar de forma inadecuada documentos clasificados y organizar pagos a una actriz porno. También es el primer presidente de la Unión Americana que ha enfrentado dos juicios políticos.