Los Ángeles, California, 8 de agosto. Un incendio forestal en una zona montañosa al norte de Los Ángeles se declaró y propagó rápidamente ayer, lo que obligó a evacuar a miles de personas.
El llamado incendio Canyon comenzó alrededor de la 1:30 de la tarde, y en apenas cinco horas había arrasado seis kilómetros (más de 2.3 millas) cuadrados, señalaron los equipos de emergencia del condado de Ventura. A última hora de la tarde seguía sin estar controlado y se extendía hacia el este, agregaron.
El fuego estaba justo al sur del lago Piru, un embalse ubicado en el Bosque Nacional Los Padres. También está cerca del lago Castaic, una popular zona de recreo calcinada por el incendio Hughes en enero. Ese incendio quemó alrededor de 39 kms (15 millas) cuadrados en seis horas y puso a 50 mil personas bajo órdenes o avisos de evacuación.
En el condado de Los Ángeles, unos cuatro mil 200 residentes y mil 400 estructuras estaban afectados por órdenes de desalojo, y otros 12 mil 500 habitantes por avisos, dijo Andrew Dowd, vocero del Departamento de Bomberos de Ventura.
Las zonas de evacuación en el cercano condado de Ventura están relativamente deshabitadas, apuntó. Cincuenta y seis personas fueron sacadas de la zona recreativa del lago Piru.
Según Dowd, el incendio estaba en una “situación muy dinámica” causada por el clima caluroso y seco, el terreno empinado y accidentado y el combustible seco. En la zona había 250 bomberos, además de helicópteros y otros apoyos aéreos, agregó.
La superintendente del condado de Los Ángeles, Kathryn Barger, quien representa el distrito, instó a los residentes a salir de la zona.
“El calor extremo y la baja humedad en nuestro condado han creado condiciones peligrosas donde las llamas pueden propagarse con una velocidad alarmante”, afirmó Barger en un comunicado. “Si los equipos de emergencias les dicen que se vayan, háganlo sin dudarlo”.
El nuevo fuego se produce mientras otro incendio forestal de grandes dimensiones en el centro de California se convertía en el mayor del año en el estado, amenazando cientos de hogares y ardiendo sin control en el Bosque Nacional Los Padres.