Brasilia, Brasil, 11 de septiembre. La mayoría de un panel de jueces del Supremo Tribunal Federal (STF) de Brasil votó para condenar al expresidente Jair Bolsonaro por intentar un golpe de Estado para permanecer en el cargo a pesar de su derrota electoral de 2022, en un fallo que profundizará las divisiones políticas y probablemente provocará una reacción del gobierno de Estados Unidos.
El político de extrema derecha que gobernó Brasil entre 2019 y 2022 fue declarado culpable de cinco cargos por tres miembros de un panel de cinco jueces. La última en dictaminar fue Cármen Lúcia, un día después de que otro juez, Luiz Fux, discrepó y votó para absolver al expresidente de todos los cargos.
Solo queda un juez pendiente de votar.
Una vez que los cinco jueces hayan votado, el panel decidirá la sentencia de Bolsonaro, que podría equivaler a décadas en prisión. El exmandatario de 70 años se encuentra actualmente bajo arresto domiciliario.
Sus abogados han dicho que apelarán el veredicto ante el pleno del Tribunal Supremo de 11 jueces.
Bolsonaro, quien ha negado cualquier delito, no ha asistido al tribunal y solo ha enviado a sus abogados.
El juicio ha sido seguido por una sociedad dividida, con personas que apoyan el proceso contra el expresidente, mientras que otros aún lo respaldan. Algunos han salido a las calles para apoyar al líder de extrema derecha.
El juicio de Bolsonaro recibió renovada atención después de que el presidente estadunidense Donald Trump vinculara un arancel del 50% sobre productos brasileños importados a la situación legal de su aliado, calificándolo de “caza de brujas”. Observadores dicen que Estados Unidos podría anunciar nuevas sanciones contra Brasil después del juicio, lo que podría tensar aún más sus frágiles relaciones diplomáticas.
El juez Alexandre de Moraes, quien supervisa el caso, declaró el martes que Bolsonaro era el líder de un complot golpista y de una organización criminal, y votó a favor de condenarlo.
A pesar de sus problemas legales, Bolsonaro sigue siendo un poderoso actor político en Brasil.
El político de extrema derecha había sido previamente inhabilitado para postularse a cargos públicos hasta 2030 en un caso separado. Se espera que elija un heredero que probablemente desafiará al presidente Luiz Inácio Lula da Silva el próximo año.
El fallo podría empujar a los legisladores aliados de Bolsonaro a buscar alguna amnistía para él a través del Congreso.