LA OCDE AVISA QUE EL PIB MUNDIAL ESTÁ CEDIENDO ANTE LA GEOPOLÍTICA

“Se prevé un nuevo descenso gradual de la inflación general”.

Claudia Luna Palencia
Internacional
PIB

No todos los países están resistiendo la tormenta geopolítica y el vendaval geoeconómico con la misma resiliencia. La economía china es un claro ejemplo de vulnerabilidad ante los grandes desafíos actuales: la última vez que su PIB creció 10.6% fue en 2010; y el año pasado lo hizo en 5.2%, mientras que en el más reciente informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos

(OCDE) para 2024 se estima un PIB de 4.7% y seguirá perdiendo fuelle en el futuro inmediato.

Que China crezca menos es una mala noticia para la aldea global: la moderación en el crecimiento chino sucederá a pesar de los estímulos políticos adicionales para intentar reactivar la débil demanda de los consumidores y la economía arrastra además problemas en su mercado inmobiliario.

En cuanto al crecimiento de la economía mundial, la OCDE lo rebaja dos décimas al pasar de un PIB de 3.1% el año pasado a 2.9% esperado en 2024 y seguirá muy condicionado por la geopolítica, la geoeconomía y la desaceleración no solo de China, sino también de Estados Unidos, que el año pasado habría crecido marginalmente 1.7% en datos preliminares, según el Fondo Monetario Internacional (FMI).

En 2024 la economía estadunidense subiría a 2.1%, pero también dependerá de la incidencia de varios factores internos y externos en un año, además, marcadamente electoral por los comicios presidenciales del 5 de noviembre.

Hay una serie de factores externos condicionando la evolución del comercio mundial y de las inversiones: las dos guerras más importantes son la invasión de Rusia a Ucrania, en camino de cumplir dos años el 24 de febrero; y el conflicto bélico de Israel contra los palestinos y Hamás de la Franja de Gaza y de Cisjordania, con efectos colaterales como el pulso de Irán financiando y dando armas a Hezbolá en Líbano y a los hutíes de Yemen para provocar una guerra regional que incluso involucre a EU.

Elecciones

A ese complicado rompecabezas de dos guerras con altas dosis de afectar los intereses regionales y alterar el flujo de las mercancías e incidir en los precios de varios commodities, como los cereales y los energéticos, se añaden las elecciones en varios países no solo involucrados directamente en los conflictos, sino que pueden ser además decisivos para cambiar los apoyos hasta ahora concedidos a Ucrania para resistir la invasión rusa.

Las elecciones en Rusia (entre el 15 y 17 de marzo); las de Ucrania que deberían celebrarse a finales de marzo y que muy seguramente debido al estado de excepción que se vive ante la guerra para repeler a los rusos no se llevarán a cabo; así como la renovación del Parlamento Europeo y de la Comisión Europea y del Consejo Europeo (a partir de junio) y las votaciones presidenciales en EU son todas, en su conjunto, relevantes para el derrotero en las guerras Rusia-Ucrania y la de Israel versus Hamás y las tensiones en Oriente Medio.

Si bien Donald Trump sigue enfrentando serios problemas judiciales y recientemente el Tribunal de Apelaciones de Washington falló de forma unánime que el expresidente no puede gozar de ninguna inmunidad por los actos de los que se le juzga mientras fue presidente de EU, la mayoría de los analistas políticos en la Unión Americana dan por descontado que Trump volverá a enfrentarse en las urnas contra el actual presidente, el demócrata Joe Biden.

Ya en Europa hablan incluso de “prepararse” para la vuelta de Trump a la presidencia.

Sin duda, ese “prepararse” hace referencia a un nuevo enfriamiento en las relaciones de EU con la Unión Europea (UE); nuevas amenazas de dejar la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN); retirar todos los apoyos militares y financieros a Ucrania; cancelar todos los fondos de ayuda a los palestinos y a varias agencias de la Organización de las Naciones Unidas (ONU); y brindarle apoyo incondicional a Israel para que reconfigure su poder estratégico, tanto al interior como en el exterior, de cara a su influencia regional. Así como un mayor enfrentamiento comercial con China y una nueva persecución migratoria.

Otros factores

La OCDE, que encabeza Mathias Cormann, recomienda anticiparse a todos estos escenarios a fin de fortalecer las bases para un crecimiento más sólido y sostenido.

“El crecimiento mundial demostró ser resistente en 2023 y la inflación disminuyó más rápidamente de lo previsto. Los resultados fueron divergentes entre los países: EU creció y lo hicieron igualmente muchas economías de mercados emergentes”, de acuerdo con el organismo internacional.

En su análisis Fortalecimiento de las bases para el crecimiento, publicado en este mes de febrero, la OCDE confirma que observa una moderación del crecimiento, en parte afectado por el endurecimiento de las condiciones financieras de los créditos en sectores como el inmobiliario, donde se ha dado un enfriamiento.

Otro factor negativo a considerar es el desempeño errático del comercio mundial, que está encontrando en la geopolítica un escollo más para las cadenas de valor.

“Los ataques a los barcos en el Mar Rojo han elevado drásticamente los costos del transporte marítimo y han alargado los plazos de entrega, lo que altera los programas de producción e incrementado la presión sobre los precios”, subraya el organismo.

Un comercio mundial que no ha logrado recobrar los flujos previos a la pandemia (en 2019) y que después del coronavirus y los cierres impuestos en varios países ha debido confrontar las sanciones impuestas a Rusia por la invasión a Ucrania y ahora sufre los estragos de la amenaza terrorista de los hutíes en el Mar Rojo y el Estrecho de Bab-el Mandeb con ataques a diversos cargueros y buques de mercancías.

Las grandes navieras están desplazando las rutas marítimas de sus cargueros, que salen de diversas partes de Asia hacia Europa, navegando mejor por el Cabo de Buena Esperanza en África, lo que implica más días de navegación, un flete más costoso y, por tanto, mercancías más caras.

Esos ataques van contra todos los buques de carga que transitan por el Canal de Suez, desde portacontenedores, pasando por petroleros y buques cisterna para crudo y gas natural licuado, hasta barcos pesqueros y remolcadores.

“Esto ya ha comenzado a alterar los programas de producción en Europa, especialmente para los fabricantes de automóviles. Alrededor de 15% de los volúmenes de comercio marítimo mundial pasaron por el Mar Rojo en 2022. El uso de una ruta más larga alrededor del Cabo de Buena Esperanza aumenta los tiempos de viaje entre 30 y 50%, dependiendo de la ruta de que se trate”, advierte la OCDE.

Europa estrangulada

Europa es el continente que más padece los estragos de ambas guerras, el efecto de las sanciones impuestas a Rusia y las distorsiones imperantes en las cadenas de suministros y el traslado internacional de mercancías.

La mayor debilidad se registra en la zona euro, que de acuerdo con la OCDE en 2024 tendrá un crecimiento marginal de 0.6% y donde la actividad se verá frenada por las condiciones crediticias restrictivas a corto plazo, antes de repuntar a medida que se fortalezcan las rentas reales.

A los países de la eurozona se ha trasladado una crisis de crecimientos marginales, casi negativos, con inflaciones elevadas que advierten del riesgo de una estanflación.

Países considerados como la locomotora de la UE tendrán un PIB muy marginal, como en el caso de Alemania, para la cual la OCDE estima un crecimiento de apenas 0.3%; y para Francia de 0.6% en 2024.

También será muy marginal el PIB de Italia con 0.7%. Y para Reino Unido, que ya no está dentro de la UE, pero sí figura dentro de las grandes economías del Grupo de los Siete (G7), la previsión del organismo internacional es de un PIB de 0.7 por ciento.

“Las elevadas tensiones geopolíticas suponen un riesgo importante a corto plazo para la actividad y la inflación, especialmente si el conflicto en Oriente Medio perturba a los mercados energéticos. Las persistentes presiones sobre los precios de los servicios también podrían generar sorpresas al alza en materia de inflación y desencadenar una revalorización de los mercados financieros a medida que se reevalúan las expectativas de flexibilización de la política monetaria”, subraya la OCDE.

Sobre el futuro inmediato de las tasas de interés la propia Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo (BCE), afirma que este año podría darse una primera decisión que reduzca las tasas de interés luego de más de 18 meses de constantes subidas para tratar de frenar la inflación en las economías europeas.

Tanto se ha enfriado el consumo, debido a estos incrementos en las tasas, que economías como las de Alemania o Francia están al borde de entrar en una recesión.

Desde su sede en París, la OCDE prevé que la inflación volverá al objetivo en la mayoría de los países, no solo de Europa, sino de todo el Grupo de los 20 (G20), a finales de 2025: “Se prevé que la inflación general en las economías del G20 disminuirá de 6.6% en 2024 a 3.8% en 2025; y que la inflación subyacente en las economías avanzadas del G20 bajará a 2.5% en 2024 y a 2.1% en 2025”.

Emergentes

La confianza del consumidor sigue siendo moderada en la mayoría de las economías avanzadas, mientras las emergentes muestran una cara más amable: a excepción de China, otras economías de mercados emergentes están teniendo un resultado muy positivo.

Dentro de los emergentes miembros del G20 destacan especialmente India e Indonesia: ambas economías tendrán un PIB robusto este año, estimado en 6.2% para la primera y en 5.1% para la segunda.

“Se espera que India e Indonesia crecerán de manera constante en los próximos dos años gracias al fuerte auge de la inversión. Las proyecciones para otras economías de mercados emergentes del G20 muestran en su mayoría una mejora del crecimiento ayudadas por unas condiciones financieras y una demanda externa más favorables”, indica el organismo.

De media, el G20 crecerá este año 2.9%, no solo impulsado por India e Indonesia, sino también por México, cuyo PIB estimado es de 2.5%, mientras Brasil crecería 1.8%. Solo Argentina se llevará un batacazo si cae, como se anticipa, -2.3 por ciento.

Inflación

Del comportamiento de la inflación en los miembros del G20, si se excluye a Argentina y Turquía, que padecen problemas inflacionarios, la media de la inflación bajará de 3.6% en 2023 a 2.6% en 2024.

“Si bien se espera que los efectos de base de los precios de la energía y los bienes básicos sean menos favorables en 2024 y que los cuellos de botella en la oferta empiecen a aparecer de nuevo, se prevé que la continua contención de la demanda a través de una política monetaria restrictiva generará un nuevo descenso gradual de la inflación general durante 2024 y 2025”, señala la OCDE.

La inflación subyacente solo disminuyó ligeramente en el conjunto de las economías avanzadas del G20 en 2023 en comparación con 2022, pero se prevé que siga moderándose en los próximos dos años, a medida que las presiones sobre los costos laborales disminuirán gradualmente.

El endurecimiento de la política monetaria y de los ciclos de precios de la energía y los alimentos también han sido los principales impulsores de la inflación en buena parte de las economías del mundo.

“Para Brasil, India, Indonesia, México y Sudáfrica se prevé que la inflación siga reduciéndose y converja con los objetivos de los bancos centrales para 2025”, de acuerdo con la OCDE.

¿Sorpresas? Podría haberlas y retrasar la vuelta a la normalidad de la inflación si los riesgos geopolíticos siguen siendo elevados: en particular, se observa con preocupación la demora en la resolución de la escalada bélica de Israel contra Hamás, que cada día se extiende más desde la Franja de Gaza hasta Cisjordania.

Recientemente, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, rechazó otro alto al fuego para intercambiar rehenes y declaró que no tiene ninguna prisa en terminar la guerra, que demorará algunos meses más.

El PIB 2024 según la OCDE

País Crecimiento estimado

India 6.2%

Indonesia 5.1%

China 4.7%

Turquía 2.9%

G20 2.9%

México 2.5%

Arabia Saudita 2.4%

Corea 2.2%

EU 2.1%

Brasil 1.8%

Rusia 1.8%

España 1.5%

PIB mundo 2.9%