Policía española desaloja a migrantes de escuela ocupada

En el inmueble vivían cerca de 400 personas

Inmigrante de Gambia en Badalona, España.
Foto: AP
Internacional
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Badalona, España, 17 de diciembre. La policía del noreste de España ejecutó órdenes de desalojo para vaciar un edificio escolar abandonado donde vivían unos 400 migrantes, en su mayoría en situación irregular, al norte de Barcelona.

Conscientes de la inminencia del desalojo en pleno invierno, la mayoría de los intrusos se habían marchado para encontrar otro sitio donde vivir antes de que agentes antimotines de la policía de Cataluña entraran en la escuela a primera hora de la mañana siguiendo órdenes judiciales. Las autoridades dictaminaron que el edificio no era seguro.

Aunque el desalojo se llevó a cabo sin violencia, hubo momentos de tensión cuando las personas que vivían allí tuvieron que pasar junto a los agentes armados.

Agentes de la Policía Nacional detuvieron a 18 personas bajo sospecha de residir en el país sin autorización, informó la abogada Marta Llonch..

El recinto ocupado está en Badalona, una ciudad obrera que limita con Barcelona. Muchos inmigrantes africanos, en su mayoría de Senegal y Gambia, llegaron al edificio desde que quedó abandonado en 2023.

"Sacar a 400 personas a la calle en invierno, a puertas de Navidad, estas personas tienen que tener el corazón muy duro", dijo Younous Drame, un hombre de 50 años de Senegal que fue uno de los obligados a irse.

Una orden judicial

La orden judicial obliga al ayuntamiento de Badalona a proporcionar acceso a los servicios sociales a los desalojados, pero no exige que las autoridades locales les encuentren otra vivienda.

Llonch, que representa a los ocupantes ilegales, apuntó que muchos seguramente se quedarán a la fría intemperie.

La migración en el centro de la política

El alcalde conservador de Badalona, Xavier García Albiol, solicitó al tribunal el desalojo de las personas de la antigua escuela pública.

El ayuntamiento alegó que la ocupación del inmueble representaba un peligro para la seguridad pública. En 2020, una antigua fábrica en la ciudad a la que llegaron a vivir de forma ilegal un centenar de migrantes se incendió y cuatro personas perdieron la vida.

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