Científicos de la Universidad de Binghamton (Nueva York) y College (Londres) descubrieron que las mujeres experimentan más dolor que los hombres cuando una relación se termina, pero son capaces de aprender y sobreponerse, mientras que los caballeros siguen adelante sin recuperarse.
Según Craig Morris, investigador de antropología, las diferencias tienen un fundamento biológico y casi económico: “En términos simples, las mujeres evolucionaron para invertir mucho más que un hombre en una relación”.
El investigador señala que “un breve encuentro amoroso podría conllevar 9 meses de embarazo seguido de muchos años de lactancia para las mujeres ancestrales, mientras que los hombres podrían ‘irse’ literalmente minutos después del encuentro, sin tener inversión biológica alguna”.
Lo que explica por qué las mujeres son más exigentes sobre la selección de una pareja de calidad y por ello son más sensibles a su pérdida.
“Mientras que los hombres sienten la pérdida profundamente durante un periodo muy largo a medida que comprenden que deben volver a empezar a competir de nuevo para reemplazar lo que perdieron”, explica Morris.
Por lo que tienden a reaccionar de una manera más autodestructiva que puede durar meses o años.
Con información de ABC.