Ciudad de México, México, 3 de diciembre. Decenas de agricultores bloquearon con tractores una entrada de la Cámara de Diputados en Ciudad de México para protestar contra una nueva legislación impulsada por el gobierno de Claudia Sheinbaum que busca imponer controles más estrictos sobre las concesiones y el uso del agua.
A menos de una semana del levantamiento de los bloqueos de vías en algunos puntos del país tras un acuerdo con el gobierno, un grupo de agricultores del centro y este del país decidió retomar las protestas y acudió al Congreso para manifestar contra una nueva Ley General de Aguas y la reforma a la Ley de Aguas Nacionales que discutirá esta semana la Cámara de Diputados, de mayoría oficialista.
"Queremos que se respeten nuestros derechos al agua", afirmó Octavio Lomeli, un agricultor de 66 años, a las puertas del Congreso al expresar su rechazo a la iniciativa promovida Sheinbaum, que según dirigentes campesinos de concretarse pondría en riesgo la actividad agrícola en algunas regiones del país que enfrentan problemas de sequía.
Al respecto, Eraclio Rodríguez Gómez, dirigente del Frente Nacional para el Rescate del Campo Mexicano, indicó esta semana que los productores están en "alerta máxima" por las dificultades que podrían enfrentar para el riego de los campos.
La iniciativa que discutirá el Congreso prevé un nuevo modelo de gestión que prohíbe la transmisión de las concesiones del uso del agua entre particulares y el cambio de uso sin autorización de la estatal Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Ante las protestas de los campesinos, Sheinbaum descartó que se vaya a detener la iniciativa y dijo en su conferencia matutina que lo que se busca es "proteger el recurso natural, evitar su sobreexplotación y garantizar el derecho al agua, y dejar de ver el agua como una mercancía".
La mandataria atribuyó las protestas a la desinformación y planteó que "quien no está de acuerdo es quien tiene muchísimas concesiones de agua, que no usan muchas de ellas, o concesiones ilegales de agua que hoy se tienen que poner en orden".
Sin embargo, la propuesta original de la presidencia tiene el acento en que las concesiones para el uso del agua ya no podrán ser transmitidas entre particulares, teniendo que volver al Estado para que la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) las pueda reasignar.
De acuerdo con los campesinos, esto les imposibilita heredar o vender sus tierras, dado que sin el permiso para uso del agua no tienen valor. Esto, dicen, transgrede sus derechos y los pone a merced de las grandes empresas que sacarán ventaja para adquirir tierras a precios irrisorios.
La semana pasada varios grupos de agricultores y transportistas bloquearon algunas vías en al menos siete de los 32 estados del país en protesta contra la inseguridad y la legislación sobre el agua y para exigir incrementos en los precios del maíz y el trigo. Los bloqueos se levantaron luego que el gobierno llegó a un acuerdo con los productores y transportistas para atender sus reclamos.

