Confirma CEM no localizable a Obispo Salvador Rangel

Se desconoce su paradero desde el pasado 27 de abril.

Norberto Vázquez
Nacional
Archivo Salvador Rangel-2
Foto: Cuartoscuro.

Ciudad de México, a 29 de abril. La Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), confirmó la desaparición de Monseñor Salvador Rangel Mendoza, Obispo Emérito de Chilpancingo Chilapa, estado de Guerrero.

Mediante un comunicado, los representantes de la Iglesia Católica en México informaron del lamentable hecho “con profunda consternación”.

Detallando que se desconoce hasta el momento del paradero del Obispo desde el pasado 27 de abril de 2024.

El Episcopado manifestó su preocupación por el hecho, del cual, hizo un llamado a las autoridades de los tres niveles de gobierno intervengan para dar con el paradero de Rangel Mendoza.

“Hacemos un llamado al Gobierno Federal, a los Gobiernos de los Estados de Morelos y Guerrero, y a las autoridades municipales correspondientes para que, en el ámbito de sus respectivas competencias, actúen de manera coordinada y eficaz a fin de traer de regreso a casa, sano y salvo, a nuestro hermano Obispo”, dice la misiva

¿Quién es Salvador Rangel?

Originario de Tepalcatepec, Michoacán, Salvador Rangel Mendoza inició su carrera sacerdotal en el seminario menor de los Operarios del Reino de Cristo, de donde pasó al seminario de la Orden de Frailes Menores, ingresando en la orden franciscana en la provincia de San Pedro y San Pablo de Michoacán.

El 24 de noviembre de 1970 pronunció sus primeros votos y realizó su profesión perpetua el 19 de diciembre de 1973. El 29 de junio de 1974 fue ordenado presbítero por el obispo de Celaya, Victorino Álvarez Tena.

El 12 de marzo de 2009 el papa Benedicto XVI lo nombró Obispo de Huejutla, en el estado de Hidalgo; fue consagrado obispo el 5 de junio de 2009.

El 20 de junio de 2015 el papa Francisco lo trasladó de Huejutla a la Diócesis de Chilpancingo-Chilapa.

Como obispo de Chilpancingo-Chilapa ha ganado notoriedad nacional por sus declaraciones en relación con la violencia causada por el narcotráfico en el territorio de su diócesis, una de las zonas más violentas de México.

Ha declarado que ha dialogado con los líderes del narcotráfico pidiendo protección para sacerdotes y religiosas de su diócesis, manifestando que en alguna ocasión gracias a su intervención habría logrado salvar la vida de un sacerdote que habría sido “condenado a muerte” por el crimen organizado.

Rangel es una figura destacada en la Iglesia mexicana, por su papel de mediador entre los grupos criminales de Guerrero.

Durante años, el obispo emérito ha hablado con líderes criminales de diferentes puntos del Estado, tratando de atajar las crisis de violencia que han azotado su geografía.

La última vez fue a principios de año, cuando medió entre Los Tlacos y Los Ardillos para detener la ola de inseguridad que atenazaba a Chilpancingo, rehén de la pelea de ambos grupos por el control de las rutas de transporte.