El cambio de color verde fosforescente a guinda con gris que portan actualmente los trabajadores que realizan tareas de servicios urbanos en la Ciudad de México por parte de la Secretaría de Obras y Servicios capitalina, podría provocar accidentes viales mientras realizan tareas nocturnas, por lo que es necesario que retornen de inmediato a los tonos que permitan visibilizarlos y garantizar su seguridad laboral, estableció la legisladora por Movimiento Ciudadano, Patricia Urriza Arellano.
En el uso de la tribuna, la integrante de la Bancada Naranja sostuvo que las tareas de limpieza son fundamentales para la estética y funcionalidad de la CDMX, pero es vital dotarles de instrumentos adecuados, para que quienes conforman dichas brigadas puedan hacerlo de manera adecuada.
“Sueña lindo corazón dice una canción que nos recuerda a los trabajadores de limpieza urbana de la Ciudad de México merecen condiciones laborales dignas y seguras. Hoy desde este espacio exhortamos a la Secretaría de Obras y Servicios a ratificar una medida que pone activamente en riesgo su inseguridad, el cambio de color de los uniformes”, indicó.
La representante ciudadana detalló que, actualmente, 2 mil 700 servidores recorren más de mil 116 km de vialidades diariamente, la mayoría de estos en horarios nocturnos, que es cuando se pueden realizar las tareas de limpieza con mayor facilidad.
El nuevo uniforme guinda, sostuvo la congresista, reduce activamente su visibilidad, aumentando el riesgo de los accidentes, ya que más allá de la institucionalización de los colores de un partido político, dicha medida puede costar vidas de quienes mantienen limpias las calles de la capital del país.
“Los uniformes deben de ser visibles y cumplir su función protectora. Los colores anteriores tenían una razón de ser, porque estas personas que realizan labores de limpieza vestían de naranja, amarillo o verde fosforescente, no por una razón de estética, no por actividades partidistas, sino por su seguridad laboral”, enfatizó.
Finalmente, la representante por Coyoacán estableció que una ciudad limpia no puede construirse sobre el riesgo de sus trabajadores y ningún hecho vial puede afectar a quienes le dedican su trabajo y su vida a mejorar las condiciones de la ciudad.
“Espero contar con el apoyo para que estos trabajadores regresen seguros y seguras a sus hogares y que no solamente sea un sueño, sino una realidad. Calles seguras para todas y para todos, a todas horas y en todas las condiciones”, concluyó.