CDMX. 11 de diciembre de 2025. La diputada federal Ariana Rejón Lara denunció que, por primera vez en 80 años, Petróleos Mexicanos (Pemex) decidió otorgar aumento salarial únicamente a los trabajadores sindicalizados, dejando fuera a más de 24 mil empleados de confianza en activo y más de 23 mil jubilados. En total, cerca de 50 mil personas fueron excluidas del incremento del 4.5 por ciento concedido al sindicato.
"Las pensiones no son un favor ni un regalo, sino un derecho adquirido. Negarles el aumento viola principios constitucionales de igualdad y no discriminación, además de romper con una tradición de ocho décadas en la que los incrementos se extendían a todo lo personal", afirmó en conferencia de prensa realizada ayer.
La legisladora explicó que la mayoría de los jubilados perciben pensiones modestas, alrededor de 9 mil pesos mensuales, y que millas de viudas y beneficiarios dependen de ese ingreso para cubrir necesidades básicas como alimentación, medicamentos y servicios. “Hoy todos ellos han sido ignorados de un plumazo”, señaló, al anunciar que el mensaje enviado es de abandono y discriminación.
Recordó que hace unos días trabajadores activos y jubilados bloquearon Marina Nacional frente a la Torre de Pemex, exigiendo igualdad y aumento salarial, mientras la empresa optó por ignorarlos. Para la diputada, esta exclusión no es un hecho aislado, sino la muestra de un modelo de gobierno que premia al grupo que le conviene políticamente.
Ante representantes del Sindicato Unión Nacional de Técnicos y Profesionistas Petroleros (Untypp), criticaron que el director general de Pemex guardara silencio en su comparecencia ante la Cámara de Diputados, impidiendo explicar la decisión. “La injusticia se quiso manejar en silencio”, subrayó.
El representante de Campeche advirtió que el mensaje es peligroso: si se puede excluir a jubilados en Pemex, mañana puede ocurrir en el IMSS, el ISSSTE o cualquier institución del Estado. Por ello, hizo un llamado a visibilizar el problema ya respaldar a los jubilados, viudas y beneficiarios que sostuvieron a la empresa durante toda su vida laboral.
Exigió a la Secretaría de Energía que asuma su responsabilidad y garantice que las decisiones de Pemex se apeguen a la ley ya los principios de igualdad. “La austeridad no puede ser pretexto para recortar derechos”, concluyó, al recordar que Pemex nació como símbolo de soberanía, dignidad y justicia para los mexicanos y debe estar a la altura de su propia historia.
Finalmente, los representantes de la Untypp, Francisco Zamora Salazar e Iván Arjona, junto con José de Jesús González, vocero de los jubilados de confianza, y el diputado panista Julen Rementería, exigieron el cumplimiento de una obligación que corresponde tanto a la empresa como al Gobierno Federal. Señalaron que la Secretaría de Hacienda, la dirección de Pemex y la Secretaría de Energía deben responder de manera puntual y transparente.
Coincidieron en que la exclusión del incremento salarial constituye un acto de discriminación sindical y lo calificaron como una violación a los principios de igualdad y justicia laboral.

